El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, sostuvo hoy que “el verdadero secreto” para terminar con los desmanes en las canchas de fútbol es «no permitir más el ingreso de los violentos a ningún estadio”, tal como aconteció con los Hooligans en Inglaterra.

Las declaraciones las formuló en la Casa de Gobierno, al ser consultado sobre la decisión del gobernador bonaerense Daniel Scioli de suspender por el resto de la temporada al estadio del Deportivo Laferrere y la prohibición para que sus hinchas concurran a ver al equipo en cualquier escenario.
“No sé si alcanza, pero es el camino”, respondió el jefe de ministros, quien subrayó la “necesidad” de proceder rápidamente con el propósito de “no lamentar más víctimas”.

También abogó por la aplicación del sistema «AFA Plus» para lograr “una base de datos común para que esas personas que están identificadas por producir desmanes no ingresen a ningún estadio más”.
Consultado sobre la pronta liberación de barrabravas el funcionario hizo incapié en que los jueces se ciñen a lo que establece la ley y dijo que “yo sería un poco más duro en ese tipo de posiciones, porque se pone en riesgo la vida”.

Por último, el funcionario aseguró que la tipificación de la figura del barrabrava “es muy difícil; cómo se determina y quién deja de serlo de un día para otro” y recordó que la provincia de Buenos Aires «no puede legislar sobre en un código de fondo, algo reservado sólo al Congreso nacional».