Los ‘tira piedras’ ya son famosos y cada vez es más frecuente este tipo de práctica contra los viajantes. Tal es así que son repetidos los ataques en la autopista Rosario-Santa Fe a la altura entre San Lorenzo y Fray Luis Beltrán, así como también en la zona cercana a Granadero Baigorria. Según informó el diario digital sl24.com.ar, los embates provienen principalmente desde el lateral este de la autopista y se producen hacia la tarde noche.
En ese contexto, una empresa de traslado de personal sufrió roturas en la mitad de su flota de micros, entre los kilómetros 11 y 17. Asimismo, el delito se trasladó a la altura del kilómetro 2, al inicio de la autopista Rosario-Santa Fe, donde ayer se produjeron al menos cinco casos en jurisdicción de Granadero Baigorria.
Según informa el medio sanlorencino, las denuncias de ataques en la zona cercana a San Lorenzo y Fray Luis Beltrán se habían producido este fin de semana, luego de que al menos una docena de colectivos fueran víctimas de los piedrazos.
Lo curioso es que en la mayoría de los casos no se dan intentos de robo, sino que se registran los ataques con piedras que vuelan desde detrás de los pastizales y nadie aparece. Se tira la piedra… y se esconde la mano.
Piden refuerzo policial
A partir de esta reiterada práctica la policía local prometió mayor presencia en el lugar, multiplicando los patrullajes y tareas de prevención.
“La orden que dimos fue reforzar la presencia en los accesos a San Lorenzo y el patrullaje entre Capitán Bermúdez y Timbúes, jurisdicción de la Unidad Regional XVII”, contó a SL24 una fuente de la policía local. El paso de los policías se multiplicará principalmente en horas de la tarde noche, que es cuando se han dado la mayoría de los ataques a piedrazos.
“Meses atrás hemos sufrido varios robos y se fueron conteniendo hasta que prácticamente no tuvimos más. Ahora parece que ese delito mutó en el ataque a los conductores, pero no parece tener como fin último el robo sino la agresión en sí misma”, analizó el policía.
“Cae la noche y la autopista se convierte en tierra de nadie”, dice enojado un conductor que acaba de sentir el golpe de una piedra en el lateral derecho de su auto cuando regresaba de Rosario y estaba pasando el puente del km 11 a la altura de Fray Luis Beltrán.
Los ataques se multiplican y la “víctima” preferida de los tira-piedras son los colectivos que transportan personal de empresas. Walter Stumpo, de la empresa de traslado Vía Zero, contó: “Cuando vuelven los colectivos vacíos después de los recorridos habituales siempre los apedrean, entre el kilómetro 11 y el acceso centro a San Lorenzo (km 17). Nos pasaba lo mismo en Circunvalación de Rosario y se calmó con la presencia de patrulleros policiales”.
Stumpo reveló que de un total de 20 micros que realizan ese recorrido 9 fueron atacados en los últimos días y ya fueron muchos los cristales que debieron cambiar, lo que ocasiona un gasto importante para la empresa. “Cuando fuimos a cambiar los vidrios vimos que en el mismo lugar estaban arreglando otros micros de otras empresas”.
“Entendemos que es difícil prevenirlo porque los piedrazos parten principalmente desde los pastizales contiguos a la autopista, del lado este. Se esconden entre los pastos y tiran”, comentó Stumpo, que al mismo tiempo señaló: “No hemos sufrido posteriores intentos de robo por lo que creemos que se trata de algo de chicos”.
La principal preocupación de los ataques es la posibilidad real de que un conductor pierda el control del vehículo y ocasione un accidente. “Si una piedra rompe un parabrisas y le pega al conductor puede ocurrir una tragedia”, advirtió Stumpo.
