Por Aldo Battisacco

Según un estudio publicado por la Asociación de Industriales de la República Argentina (Adimra), en el primer bimestre de 2016 la producción metalúrgica se contrajo -8,2% interanual, ocasionado por una caída de -8,8% en enero y -7,6% en febrero. Además, desde el Departamento de Estudios Económicos de la entidad,  se estableció que la capacidad instalada (UCI) se ubicó en torno al 51,1%, manifestando una baja interanual del 15,1%.

En el documento, precisan desde Adimra que estos datos describen la generalidad de la industria metalúrgica, ya que en su interior se verifican diferentes comportamientos, puesto que la mitad de las empresas sufrió una caída de su facturación y más de un 25% de firmas aumentó sus ingresos por ventas al menos un 20% en comparación al mismo período de 2015.

En relación a los niveles de empleo, el 38% de los empresarios indicó que redujo su plantilla de personal en el primer bimestre del año en relación al mismo período del año anterior, mientras que sólo el 19% vio aumentada la cantidad de empleados ocupados y se advierte un fuerte incremento del porcentaje de empresarios que afirmaron haber reducido la cantidad de horas extras, acentuando la tendencia iniciada en los últimos meses.

Por otro lado, no se observa la existencia de medidas relevantes vinculadas a la suspensión de personal o solicitud de REPRO (proceso preventivo de crisis).

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A nivel regional, en los dos primeros meses del año se observaron diferencias en el nivel de actividad metalúrgica. En la provincia de Buenos Aires (incluye CABA), el sector experimentó una fuerte caída interanual, donde incidieron principalmente los rubros “Productos de Metal”, “Fundición de Metales” y “Forja de Metal y Piezas Varias”. Por otro lado, el rubro “Equipos y aparatos eléctricos” mostró un leve crecimiento en su nivel de producción.

En Santa Fe la actividad se contrajo, impulsada por el rubro “Máquinas y Equipos”, en especial“Maquinaria Agrícola” y “Otras Maquinarias de Uso General o Especial”.

Cabe señalar, que a nivel sectorial existe una importante heterogeneidad entre las principales actividades metalúrgicas. Dentro de los rubros que tuvieron las mayores caídas en su producción durante enero y febrero se encuentran “Máquinas y Equipos” (sector petrolero, agrícola o de uso general), “Productos de metal” y “Autopartes”. Por otro lado, los rubros “Remolques y Semirremolques” y “Equipos y aparatos eléctricos” mostraron un crecimiento en su nivel de producción.

En relación a las expectativas de producción para el trimestre marzo-mayo, prevalece la idea de una futura disminución en el nivel de actividad. Como dato relevante se puede afirmar que cerca de la mitad de los empresarios del sector indicaron que prevén una caída en su producción, mientras que solo un 30% espera una mejora en los próximos meses.

Los industriales, destacan que se advierte una importante heterogeneidad en las expectativas en relación a las diferentes regiones. Buenos Aires se muestra como la región más pesimista, alcanzando casi el 60% de percepción negativa en torno a los próximos meses. Santa Fe aumentó su percepción positiva de cara al futuro de corto plazo, aunque no redujo la expectativa negativa.

En relación a las distintas actividades del sector, el cuadro de expectativas general evidencia un perfil heterogéneo. Se destaca por su perspectiva de mayor crecimiento el rubro “Maquinaria Agrícola”, mientras que en los rubros “Productos de metal” y “Otras Máquinas y Equipos” prevalece una expectativa de menor desempeño.

En el plano externo, continúa verificándose una reducción en el volumen de comercio, ya que en el primer bimestre de 2016 las exportaciones metalúrgicas (u$s 350 millones) disminuyeron -21,5% interanual, mientras que las importaciones (u$s 3.316 millones) aumentaron 2,4%. De esta forma, el sector acumula en el año un déficit comercial de u$s 2.965 millones, un 6,2% más alto que en el mismo período de 2015.

En tanto que en el sector de maquinarias, las ventas al exterior disminuyeron -26% y las compras -11%. El déficit comercial alcanzó los u$s 773 millones, siendo un -9,4% menor al de los primeros dos meses de 2015.

Los trabajadores fijaron posición a través de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM)

Por su lado, los trabajadores comienzan a sentir las consecuencias de la endeblez progresiva que afecta a la industria manufacturera local. Para medir el impacto directo sobre los trabajadores en tanto condiciones de trabajo, despidos, suspensiones y retiros voluntarios, Conclusión dialogó con Antonio Donello de la UOM regional Rosario, quien dio precisiones sobre cual es la realidad de sus representados y marcó un panorama en relación a la evolución del empleo y salario.

El dirigente, señalo que «de los 18 000 mil trabajadores que están sindicados en la regional que comprende Rosario y otras localidades aledañas a la ciudad, son 70 los casos en los que se registró la aceptación de retiros voluntarios, suspensiones en tres empresas  y 40  despidos que devienen de la falta de consumo de productos que anteriormente eran demandados por el mercado interno por poseer mayores ingresos».

Para el líder metalúrgico, el cambio de paradigma económico «generó que en los últimos tres meses no se renovaron más de 200 contratos», por otro lado «se ensayó desde la organización sindical, una serie de acuerdos que evitan el despido de trabajadores de las empresas, llegando a garantizar la continuidad  de los trabajadores registrados hasta  octubre en algunos casos y otros llegan a diciembre», seguidamente agregó  «que si esta realidad económica no cambia se comenzará a sufrir despidos de personal».

Según el gremialista, la forma que se pudo consensuar con los empresarios y el ministerio de Trabajo, «fue atenuar las cargas patronales, para evitar que se suspenda o despidan operarios efectivos». La homologación de estos acuerdos facilitó que hasta fin de año no haya consecuencias desafortunadas para los trabajadores que hoy alcanzan a 4000 si tomamos las empresas que aceptaron participar de esta modalidad».

«La falta de poder adquisitivo, afecto la producción por falta de consumo, esto impactó directamente en la industria porque no es necesario hacer la misma cantidad de productos porque no se pueden comprar y esto empuja a los industriales a despedir trabajadores. Hay que tener que la actividad cayó entre un 20 a 25%» manifestó Donello.

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Antonio Donello

«Las importaciones también han tenido serias consecuencias, y si llegan a ampliarse a mitad de año se perderán miles de puestos de trabajo, no se puede competir con las manufacturas subsidiadas que ingresan mayoritariamente del mercado asiático precios de dumping, a ello se suma el incremento de la tarifa de energía, todo esto conspira contra el empleo», a lo que agrego enfaticamente «que no se puede bajar la inflación enfriando la economía».

«El anterior Gobierno -dijo Donello- con aciertos y errores siempre trato de sostener la capacidad de consumo de la población y esto ayudó a que no se pierdan puestos de trabajo, el gobierno de Macri empezó al revés, creen en la teoría del derrame, sin embargo ya sabemos como terminó el programa de gobierno que trató de basarse  en estos conceptos, el año 2101 es la prueba mas contundente de lo que afirmamos los trabajadores».

Con la intención de dar una postal de lo acontecido los últimos años, el dirigente referenció que «hay que tener en cuenta que la regional Rosario de la UOM en 2001 solo tenía 5000 trabajadores metalúrgicos, y muchos otros gremios que crecieron exponencialmente como el maderero, el textil, el calzado y muchos otros que hoy están compartiendo los mismos problemas por los costos internos, y la gradualidad con la que llegan las importaciones».

Asimismo, el referente de los trabajadores criticó los criterios «con los que encara los problemas el Gobierno, y el error de posicionar CEOs de empresas en ministerios claves de la Nación, sobran empresarios en los cargos políticos, se debe tener en cuenta que al Estado no se lo puede administrar como una empresa, el rol estatal escapa a este tipo de dinámica con una óptica de neto corte empresario», sentenció el metalúrgico.

Por último, el sindicalista, se mostró esperanzado en que el «buen tino llegue a los hombres del Gobierno nacional y reflexionen sobre las necesidades reales de los trabajadores, que no son otras que las de los intereses de la Nación porque son quienes generan riqueza» y recalcó que «los trabajadores apuestan a que al gobierno le vaya bien, pero es necesario que se diagnostique correctamente y se tomen soluciones que no conlleven el alto costo que se está comenzando a sufrir producto de medidas que no se apartaron del consenso de Washington», concluyó Antonio Donello.