El 10 de noviembre de 2016 el gobierno del Estado norteamericano de Georgia anunció que la Guardia Nacional de ese Estado había sido seleccionada como la operadora del Comando Sur militar estadounidense para la República de Argentina como parte del Programa de Asociación Estatal (SPP por sus siglas en Inglés) del Departamento de Defensa.

La noticia fue dada a conocer recién el 14 de diciembre de 2016 por el Ministerio de Defensa  argentino a través del Informe de Prensa  N° 523/16 que informó: “El Ministro Martínez firmó un convenio de ayuda humanitaria con la Guardia Nacional del Estado de Georgia, Estados Unidos, para brindar asistencia ante catástrofes naturales y ayuda humanitaria. Mediante la firma de este convenio, presentado ayer en la Embajada de Estados Unidos por el embajador argentino en Washington, Martín Lousteau, Argentina pasa a integrar el Programa de Colaboración Estatal del Departamento de Defensa (SPP), lo que permitirá que las Fuerzas Armadas nacionales desplieguen actividades conjuntas con la Guardia Nacional del Estado de Georgia”.

Por su parte la Embajada norteamericana destacó en un comunicado que “inspirado en las metas de política exterior del Departamento de Estado de los Estados Unidos, el SPP es administrado por la Oficina de la Guardia Nacional y apoya los objetivos de cooperación en materia de seguridad de los comandantes de teatros de operaciones”. Cabe recordar que este convenio fue pedido a  principios de 2016 por el gobierno argentino de Mauricio Macri.

El convenio expresa: “El SPP entre el Estado de Georgia y Argentina establecerá las bases para desarrollar una relación exitosa a largo plazo, mediante el conocimiento en respuesta a la compartición de emergencias y desastres, la mejora de  la seguridad fronteriza y el fortalecimiento de la cooperación en Operaciones de Paz y su preparación” . Además agrega: “Gracias a la Alianza, la Guardia Nacional  llevará a cabo acciones militares entre los dos grupos, no sólo en apoyo de los objetivos de seguridad y defensa sino que también hará uso de las relaciones de toda la sociedad y recursos para facilitar las acciones interinstitucionales y   de  respuesta, no sólo con los medios militares sino también con el gobierno,  y  los  sectores  sociales  y  económicos”.

Como  se  establece  en  los  documentos  oficiales  la  Guardia  Nacional  se  guía  por  los  objetivos de Política Exterior del Departamento de Estado y los de Seguridad  del Departamento  de  Defensa de  los  EE.UU.   Aclaramos que en los Estados Unidos las FF.AA permanentes sólo están autorizadas a operar fuera de su territorio. Para la Seguridad Interior las Fuerzas de Seguridad pueden ser reforzadas,  si  es  necesario,   con efectivos militares de la llamada Guardia Nacional, que  forman parte  de la   Reserva Militar Permanente y están en condiciones de  operar  en la Seguridad Exterior, conjuntamente con el resto de las fuerzas armadas.

En este tipo de  colaboración  el Convenio  determina   expresamente   que  cuando  lo consideren  necesario los efectivos militares de la guardia nacional  podrán  operar  en  el  país asociado  y si es necesario tomar  decisiones con y por sobre las Fuerzas Armada y de seguridad  locales.

El  “convenio”  dado  a  conocer  es  la  forma  consensuada  entre  los  gobiernos  argentino  y  norteamericano  para  habilitar  la  posibilidad  de   volver  a   emplear  a  personal  militar  en la   Seguridad  Interior,  eludiendo,  burdamente  la  prohibición  explícita  de  lo  determinado  por  las  Leyes  de  Defensa  Nacional  y  de  Seguridad  Interior al originar  la  alternativa  del empleo de   fuerzas  militares  estadounidenses  en   esas  tareas  bajo  el  pretexto  de “mantener la paz”. Múltiples convenios de este tipo se han establecido últimamente en países africanos con resultados desastrosos.  Ante esta situación el Centro de Militares para la Democracia Argentina (Cemida) propone que las organizaciones políticas y sociales se movilicen para solicitar que el Congreso Nacional no apruebe   este nefasto “convenio”  por los peligros que su vigencia representará: Volver a la represión militar interna establecida por la Doctrina de la Seguridad Nacional, ahora por la puerta de servicio desde donde ingresarán efectivos militares foráneos capitaneados por el tristemente famoso: Comando Sur de los EEUU.

Fuente: Alainet.org