A partir del último informe del Indec, se conoció que cayó el empleo privado formal y que las mejoras que hubo respecto al primer semestre se relacionan con el aumento de monotributistas y autónomos.

Según ese relevamiento que obtuvo el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, hubo una mejora en el empleo durante el tercer trimestre, dado que el desempleo pasó de 9,3 por ciento a 8,5 por ciento. Sin embargo con una caída del 3,4 por ciento del PBI es imposible pensar en un aumento del empleo. Lo que sucedió es que aumentó el trabajo precario, transitorio y temporario.

En este marco, Juan Luis Bour, economista jefe de FIEL, sostuvo que “no se puede hablar de un aumento del empleo en los últimos meses. El crecimiento –aclaró- o la caída del empleo están relacionados con el producto bruto: si el PBI crece un 3 por ciento, el empleo se expande, pero si es a la inversa, se contrae. Con una caída del 3,4 por ciento en el PBI, en el segundo trimestre el empleo debería haber caído más. Lo que pasa es que salen al mercado cuentapropistas y monotributistas. Crecen los empleos precarios, transitorios, temporarios”, explicó.

En comparación con septiembre de 2015 con el mismo mes de este año, según datos del Ministerio de Trabajo, hay 91.738 asalariados menos en el sector privado y se sumaron 33.602 monotributistas, 8593 trabajadores de casas particulares y 6184 nuevos autónomos.