El precio de los combustibles aumenta un 8% a partir de este jueves luego de un acuerdo alcanzado entre las empresas petroleras y las refinadoras que permitió trazar un sendero de convergencia de precios del barrio del crudo en el mercado internacional y el del denominado barril criollo, lo que se alcanzará en 2018.
El acuerdo fue anunciado ayer por el ministro de Energía, Juan José Aranguren, quien dijo a la prensa que el acuerdo da lugar a que «los precios de los combustibles aumenten un 8 por ciento a partir de mañana» con revisiones trimestrales que permiten anticipar un nuevo incremento para la primera semana de abril.
La discusión de fondo que permitió destrabar el primer aumento de los combustibles del año -ya discutido y postergado desde los últimos meses de 2016- fue el acuerdo que suscribieron las refinadoras y productoras de petróleo para converger hacia el precio internacional del denominado «barril criollo».
Este camino hacia un esquema totalmente desregulado, permitió afirmar al ministro Aranguren que «si se deja actuar al mercado los precios en Argentina van a bajar».
Luego de casi dos horas de reunión esta tarde en la sede del Ministerio de Energía, y tras un cuarto intermedio tras un primer encuentro realizado por la mañana sin resultados, Aranguren precisó que «las naftas y los gasoil, todos los productos por igual, mañana estarían aumentando un 8 por ciento», aunque aclaró que «no es una decisión del Gobierno».
«Junto a este acuerdo damos certeza y previsibilidad que durante el primer trimestre solamente habrá este aumento del 8%, en la medida en que no haya una escalada de precios internacionales que haga discontinuar lo firmado», aclaró el funcionario.
Luego, trimestralmente las compañías están habilitadas para trasladar al precio de los combustibles el resultado de la caída del precio del crudo en dólares, la potencial evolución del tipo de cambio en previsión de una devaluación -como está prevista en el Presupuesto nacional- y el impacto que tienen los biocombustibles.
Como ejemplo del incremento de precios que se reflejará en los surtidores a partir de esta medianoche, la nafta súper de YPF pasará a 18,44 pesos por litro en la ciudad de Buenos Aires y la Premium a 20,85, valores que se incrementan en distintos puntos del conurbano y más aún en todo el interior del país con diferencias de hasta 2 pesos por litro.
Por la política comercial que vienen desarrollando las empresas Axion y Petrobrás, es de esperar que ambas compañías se ubiquen en el mismo nivel de precios que YPF, la líder del mercado con el 57% del total de ventas.
En tanto la petrolera Shell publicará sus productos algunos centavos por encima por lo cual la nafta súper valdrá 18,85 pesos por litro y la V-Power (Premium) 21,57 por litro, mientras que en el caso del diesel los nuevos valores serán 17,18 y 19,99 para las dos calidades.
Como discusión de fondo, de la jornada de hoy se destacó que las empresas firmaron un acuerdo -refrendado por el Ministerio de Energía- por el cual se traza el camino hacia la normalización del mercado de los combustibles en la Argentina, distorsionado en los últimos años por la caída abrupta de los precios internacionales del crudo que se pretendió compensar con un precio sostenido mediante subsidios.
Ese precio sostenido se conoció como «barril criollo» que era el precio que mediante subsidios del Estado nacional se le aseguraba a las empresas productoras -tanto en la Cuenca Neuquina como en la cuenca del Golfo de San Jorge- a cambio de mantener los niveles de producción y de empleo.
En ese sentido, el ministro explicó que durante el encuentro «la gran mayoría» de los representantes de las empresas refinadoras y los productores de petróleo, «llegaron a un acuerdo para tener un sendero de precios que les permita acercarse en los próximos meses, a los precios internacionales».
«Hay algunos productores de crudo pesado que todavía no están convencidos de que la velocidad » para llegar al precio internacional «es la que está planteada, y quedaron que en los próximos días lo puedan acordar entre ellos».
Aranguren explicó que en la actualidad el valor del crudo en el mercado internacional está en 55 dólares «y los precios que están figurando en este momento en el acuerdo están para enero en los 59,4 dólares para el medanito y 48,13 para el escalante. Ya podemos decir entonces que cuando mezclamos los dos crudos estamos en los precios internacionales».
A partir de esta referencia adoptada para el presente mes, comienza una curva descendente de precios hasta los 55 dólares para el medanito (Cuenca Neuquina) y los 47 dólares el escalante (Cuenca del Golfo) para mantenerse en el segundo semestre en ese nivel para llegar a enero de 2018 con la liberalización del mercado de combustibles.
«La idea como ocurrió en 2015 y en 2016 era lograr terminar 2017 con un nivel de precios que sea lo más cercano al mercado internacional y tiene un piso en los 55 dólares el barril para el crudo de la cuenca neuquina, para que también la provincia tenga la certeza de que por debajo de ese precio no va a recibir menos regalías», explicó el ministro.
No obstante, como los precios pueden subir y bajar en el mercado internacional, «si en algún momento el precio en el mercado local está por debajo del precio internacional, en 10 días de publicación del crudo Brent, automáticamente se suspende la vigencia del acuerdo» y las partes se volverán a reunir para negociar.
El acuerdo no fue firmado por una sola compañía petrolera que opera en el Golfo de San Jorge y que representa el 12 por ciento de la oferta total de crudo en el país, y que ahora tendrá la opción de exportar lo producido sujeto a los vaivenes del mercado internacional.
«Obviamente me hubiera gustado que estén todos adentro», admitió el ministro al aclarar que la voluntad del Gobierno es «respetar la libertad del mercado» y «así como el sábado terminaron 15 años en donde había retenciones en la exportación de petróleo crudo y derivados, estamos convencidos que si se deja actuar al mercado los precios en Argentina van a bajar».
Finalmente, Aranguren explicó la situación de precios que atravesaron los combustibles en 2016, al señalar que el precio del crudo en pesos aumentó en Argentina un 42% mientras que los combustibles fueron aumentando en forma escalonada hasta el 31%, y quedó en suspenso en octubre el aumento del 8% que finalmente quedó habilitado esta tarde.
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