Héctor Giuliano, licenciado en Administración y Finanzas y experto en deuda pública y externa, suscribe una nota periodística en la cual afirma que “Macri sigue batiendo récords históricos de emisión de deuda pública, externa e interna,  siguiendo un programa de endeudamiento en gran escala con total irresponsabilidad fiscal porque se trata de deudas que el Estado Argentino no puede pagar”.

Hace luego un duro cuestionamiento a cómo se vienen realizando esas colocaciones, señalando que son “por montos elevadísimos, bajo condiciones discrecionales que son manejadas directamente y en forma secreta por el actual Ministerio de la Deuda – oficialmente denominado Ministerio de Finanzas – siguiendo un programa de endeudamiento en gran escala – eufemísticamente llamado Programa Financiero – y sin que exista la más mínima demostración de capacidad de repago sobre las obligaciones financieras que se están asumiendo –agrega- con total irresponsabilidad fiscal porque se trata de deudas que el Estado Argentino no puede pagar”.

Ocultamiento

Pone luego la lupa sobre lo que considera “el ocultamiento de la situación real y concreta de iliquidez e insolvencia de nuestro país, ya que el gobierno Macri –en complicidad con sus acreedores– procede a seguir refinanciando sistemáticamente la totalidad de los vencimientos de capital (a medida que se producen y hasta el último centavo), con nuevas deudas y además a contraer deudas adicionales, que están destinadas en su gran mayoría a cubrir el déficit fiscal creciente de su administración. Con el agravante –explica- que la mayor parte de estas colocaciones de deuda se aplican así para sostener la financiación de gasto público corriente, lo que está prohibido por la Ley 24.156 de Administración Financiera y sus normas conexas, dado que el artículo 56 de la ley dice taxativamente que se prohíbe realizar operaciones de crédito público para financiar gastos operativos”.

Dice Giuliano que durante el primer mes de este año, el gobierno de Cambiemos ha colocado deuda pública directa –es decir, sólo deuda de la Administración Central– por más de 17.000 millones de dólares.

Préstamo de bancos internacionales

Detalla dicha afirmación con estas cifras: un préstamo de 6.000 millones de dólares a 18 meses de plazo y tasa de interés nominal del 3.8 % anual (2.9 % más Libor 0.9), con garantía de títulos Bonar 24; otorgado por los bancos BBVA (Bilbao Vizcaya Argentaria), Citibank, Deutsche Bank (DB), HSBC (Hong Chan), JP Morgan y Santander. Son los mismos bancos que actúan como colocadores de bonos en el exterior y se entiende que este crédito consorciado y a corto plazo (un año y medio) actúa en la práctica como préstamo-puente dentro del escalonamiento de la colocación de bonos según el Programa Financiero 2017.

Agrega, a ese resumen, dos nuevos títulos por u$s 7.000 millones, bajo ley extranjera de Nueva York: uno, a 5 años de plazo (vencimiento 2022) por 3.250 millones de la misma moneda, con tasa de interés de 5.625 %; y otro a 10 años (2027), por u$s 3.750 millones, con tasa del 7.0 %.

Todos estos bonos y préstamos que emite el Estado son de tipo bullet, es decir, que amortizan el capital o principal íntegramente a su vencimiento, pero pagan intereses en forma semestral; si bien las autoridades no suministran detalles sobre las condiciones contractuales de tales obligaciones ni mucho menos sobre los compradores de títulos.

Supuesto éxito

“El gobierno Macri se ha jactado –dice el licenciado Giuliano- del supuesto éxito de esta doble colocación de bonos –las ofertas fueron por 22.000 millones de dólares contra un requerimiento original de 5.000– pero la realidad es bastante diferente porque en este momento existe excedente de capitales especulativos en el mundo y ello deriva, como siempre, en una muy fuerte presión por parte de los grandes grupos financieros internacionales para colocarse en países como la Argentina, que en la actualidad emite deuda a las tasas de rendimiento más altas del planeta”.

Recuerda luego que por Decreto 29/2017, del 11 de enero último, el presidente Macri facultó al Ministerio de Finanzas para contraer un total de nueva deuda externa por u$s 20.000 millones durante el corriente año, incluyendo cláusulas que establezcan la prórroga de jurisdicción ante tribunales extranjeros (Nueva York y Londres) y que dispongan la renuncia a oponer la defensa de inmunidad soberana (con restricciones varias que son de rigor en estos casos), como también la inclusión de Cláusulas de Acción Colectiva (CAC) y Pari Passu.

Por el mismo decreto, aparte de reiterarse algunas autorizaciones generales ya consignadas en la Ley 27.341 de Presupuesto 2017, se incorpora además toda una serie de facultades amplias a través de las cuales el Ministerio de Finanzas puede decidir lo que quiera en materia de colocaciones de Deuda Pública.

Condiciones discrecionales

“El texto de estas autorizaciones cuasi-irrestrictas está prácticamente copiado de la Ley 27.249, que el año pasado autorizó al entonces Ministerio de Hacienda y Finanzas Públicas – como Autoridad de Aplicación – a colocar las nuevas obligaciones de deuda para pagar los juicios contra los holdouts bajo las mismas condiciones absolutamente discrecionales”, explica sobre el particular.

En total, se estima que el gobierno de Macri ha colocado -solamente durante el mes de Enero- deuda pública, externa e interna, por más de 18.000 millones de dólares, incluyendo letras.

Y la serie de colocaciones continúa: en estos días se ha publicado, en la página web del Ministerio de Finanzas, un nuevo llamado a licitación de Letras del Tesoro en dólares (a 95 y 186 días) y Bonos del Tesoro en pesos a tasa fija con vencimientos 2021, 2023 y 2026.

Estos últimos – los bonos – tienen tasa de interés invertida de 18.20, 16.00 y 15.50 % anual respectivamente, que se pagan semestralmente, y se colocan bajo la par para garantizar mayor rendimiento a los inversores financieros.

Peligroso sobre endeudamiento

Con este conjunto de nuevas colocaciones de deuda el Gobierno Nacional encara un peligroso sobre endeudamiento durante el año electoral 2017 y lo hace al amparo de la Ley de Presupuesto 27.341, que autoriza un aumento de la deuda durante el ejercicio de 38.200 MD: vencimientos de capital por 58.200 MD contra emisión de nueva deuda para cubrir las cancelaciones y tomar deuda adicional por 96.400 MD.

Dice finalmente que “la administración Cambiemos aumenta fuertemente y acelera así en forma muy peligrosa el cuadro de endeudamiento público heredado de la gestión Kirchner, con el agravante que lo hace usando una preponderante nueva deuda con el exterior. Y este panorama se agrava adicionalmente con el cambio de estructura, composición y características del endeudamiento”.