En la cadena Carrefour, de capitales franceses, se habla de 250 despidos en híper y supermercados y en un centro de abastecimiento, pero en la empresa lo desmienten y aseguran que se trata de un rumor: «Carrefour no tiene plan de despidos masivos», aseguraron desde la firma.

De todos modos, reconocen que 2016 fue un muy mal año para las ventas, «tal vez el peor en los últimos diez años y más aún este bimestre», pero no creen que sea un buen momento para achicar su planta.

«Los únicos despidos del año pasado fueron en Santa Fe por el tema del descanso dominical y al final todos fueron reincorporados», sostuvo un vocero de la empresa. «Si no hubo despidos el año pasado, menos va a haber ahora que se espera un repunte del consumo», agregó.

El peor año fue 2016

Carrefour reconoció que el 2016 fue el peor año en la última década. Al negocio lo sostienen los minimercados Express, porque por la crisis la gente ya no va a los hipermercados a hacer esas compras que llenaban el changuito.

Pero además de baja del consumo, desde el sector explican que hubo un cambio en la conducta de los compradores y que «en este momento lo único que camina son los Express».

Las compras mensuales y los changos llenos quedaron atrás. Los compradores de los grandes centros urbanos redujeron el volumen de sus compras y solo llevan lo justo y necesario. Por eso los hipermercados son la unidad de negocio con peor proyección.

Irónicamente, los mayoristas también funcionan. Parte de los consumidores de los hipermercados los reemplazaron por compras más espaciadas y al por mayor como estrategia para defender el bolsillo. De hecho, sus ventas crecieron 2% en términos reales en 2016, cuando el Indec relevó una caída real del 8,9% en las ventas de los supermercados (producto de un crecimiento nominal de 24,4% contra un 36,6% de inflación en el promedio nacional).

Creen en el repunte del consumo

En enero, según la consultora Scentia, sólo los pequeños comercios de cercanía mostraron su primera suba luego de nueves meses consecutivos de retracción, con una leve alza de 0,4%, mientras que súper e hipermercados cayeron un -9,4% interanual. Y en febrero, volvieron a caer las ventas 6,6%.

Y aunque en la cadena de supermercados creen que el consumo va a repuntar por la mejora del poder adquisitivo, son muy medidos en su optimismo: descreen que la baja de la inflación alcance para fomentar el consumo porque los aumentos en las tarifas desplazan el consumo. A la hora de mirar hacia adelante, prima la incertidumbre.