Centenares de familiares, vecinos, estudiantes y militantes políticos despidieron este martes  a Micaela García en el cementerio municipal de la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay entre aplausos, vítores y banderas, en su mayoría de la agrupación Evita Militante, a la que pertenecía la joven hallada asesinada el sábado en Gualeguay.

La multitud, que colmó un kilómetro, caminó 25 cuadras desde el estadio cerrado del Centro Provincial de Educación Física «Hugo La Nasa», donde se desarrolló el velatorio, hasta llegar al panteón de la abuela de Micaela, de apellido Bruno.

Los restos de la joven llegaron escoltados por su padre, Néstor García; su novio, Alejandro Jacquet; el senador Juan Manuel Abal Medina, el ex canciller Jorge Taiana y Emilio Pérsico, líderes del Movimiento Evita.

«Hagamos el país que Micaela soñó», le pidió el padre de la víctimas a los presentes y rogó a todos que se retiraran tranquilos porque «más no podemos hacer, ya la hemos acompañado hasta aquí».

Andrea Lescano, su madre, pidió como un último deseo que le cantaran un feliz cumpleaños a su hija, aunque no fuera hoy, e instantáneamente se escuchó una versión libre de la canción.

Los restos de la joven hallada asesinada el sábado reposarán en el panteón hasta que puedan ser cremados en Gualeguaychú para luego esparcir sus cenizas en villa «La Mandarina», de Concepción del Uruguay, donde militaba Micaela.

La columna que acompañó el cortejo fúnebre hizo el recorrido de unas 25 cuadras acompasado por un cántico que replicó durante todo el trayecto: «Micaela presente, ahora y siempre».

Banderas, niños en brazos, equipos de mate, remeras con inscripciones y cochecitos fueron algunas de las imágenes que pudieron verse en la recorrida de la gente, que llegó cerca de las 18 hasta el cementerio y, entre aplausos y sin discursos, despidió a la joven.

Los vecinos también se apostaron en esquinas del trayecto que une el gimnasio cubierto con el cementerio municipal para sumarse al cortejo.

La despedida a Micaela comenzó por la mañana, cuando unas 1.500 personas participaron del velatorio en el estadio cerrado del Centro de Educación Física, el cual fue decorado con banderas y una gigantografía de la víctima, despedida bajo el lema «Por vos juramos vencer».

«Las paredes se limpian, las pibas no vuelven»; «Nadie es capaz de matarte en nuestras almas»; «Siempre juntas»; «Con tu sonrisa como bandera»; «Insoportablemente viva», fueron algunas de las frases que colgaban de las paredes del estadio.

Los vecinos del lugar ingresaron pausadamente al estadio con carteles y pancartas para despedir a Micaela y reclamar Justicia.

Además de ser saludados personalmente por la diputada nacional Juliana Di Tullio (FpV), Abal Medina, Taiana y Pérsico, los padres recibieron el llamado telefónico del gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet (FpV), con quien acordaron un encuentro que aún no tiene fecha.

«Estuve hablando con su papá», dijo el gobernador entrerriano y contó que tuvieron «una charla donde resaltábamos los ideales y los valores que tuvo Micaela en su trayectoria, muy corta por cierto”.

Esos valores “son también los que alguna vez compartimos de jóvenes quienes llevábamos adelante la militancia política y que hoy que nos toca, con la responsabilidad de gobierno, tenemos que bregar para hacerlos realidad», exprsó Bordet.

Durante el velatorio, se colocaron urnas para que la gente depositara dinero que será destinado a los barrios carenciados donde militaba la joven, y se escuchó mucha música de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, la banda preferida de Micaela.

Los padres recibieron también un llamado del “Indio” Solari, que elogió a la víctima y, a pedido de la madre, cantó una estrofa del tema “Juguetes Perdidos”.