Unas 40 tumbas fueron profanadas este lunes por la madrugada en el cementerio de la Chacarita, en Capital Federal, entre ellas la del ex titular de la CGT José Ignacio Rucci.

El busto del sindicalista asesinado en 1973 fue robado, al tiempo que se destruyeron o robaron lápidas y placas de las sepulturas que estaban a su alrededor.

La central obrera fue contundente al repudiar los hechos a través de un comunicado:

«Un ataque a la figura de José Ignacio Rucci constituye un agravio al peronismo y a todo el movimiento obrero. Reclamamos que las autoridades policiales y judiciales investiguen este cobarde atentado. Este tipo de hechos forman parte de un pasado al que los argentinos no queremos volver. Ante este episodio los trabajadores redoblamos nuestro compromiso de unidad bregando para (que) nunca más tengamos que vivir episodios como este en nuestra querida Argentina», expresaron.