Una central nuclear que se instalará en Río Negro podría poner en peligro las áreas protegidas y la vida marina del Golfo de San Matías y espantar el turismo en Las Grutas, San Antonio Oeste y la Península de Valdés.

La Península de Valdés fue declarada Patrimonio de la Humanidad y está a poco más de 100 kilómetros del lugar en el que se asentaría la central.

La idea de que la energía nuclear es barata y limpia está siendo cada vez más cuestionada. En la Catedral de Viedma, la capital rionegrina, ya se realizaron dos asambleas informativas y abiertas.

Además, el debate tiene otra arista, que tiene que ver con el posible impacto ambiental que podría tener la central nuclear en el Golfo de San Matías, famoso por la riqueza marina y fundamental para la economía regional por el flujo turístico.

La central nuclear estaría en una zona muy valorada por su biodiversidad, y del balneario El Cóndor, donde está la colonia de loros barranqueros más grande del mundo.

En ese sector del Golfo de San Matías, a su vez, hay cinco Áreas Naturales Protegidas: «Caleta de Los Loros», «Bahía de San Antonio», «Punta Bermeja – La Lobería», «Complejo Islote Lobos» y «Puerto Lobos».