El ministro de Comercio Internacional británico, Liam Fox, se reunirá en Washington con su homólogo estadounidense, Robert Lighthizer, con el fin de avanzar en un futuro acuerdo de libre comercio con Estados Unidos luego del Brexit, como se llama a la renuncia del Reino Unido como socio de la Unión Europea.
Estados Unidos es la mayor fuente de inversión extranjera en el Reino Unido y el comercio entre los dos países equivale a más de 150.000 millones de libras esterlinas (más de 200.000 millones de dólares) al año.
«La primera reunión del grupo de trabajo sobre Comercio e Inversión entre el Reino Unido y los Estados Unidos es el comienzo del próximo capítulo de nuestra relación especial», afirmó Fox.
La reunión apunta «a identificar áreas en las que podemos trabajar juntos para fortalecer los lazos comerciales y de inversión», agregó el representante comercial británico.
Fox compartirá mañana un desayuno con legisladores estadounidenses y hablará sobre las relaciones comerciales entre cada uno de los 435 distritos del Congreso de los Estados Unidos y el Reino Unido, esbozados en un nuevo informe sobre la relación económica bilateral.
El informe, difundido a la prensa por los británicos, destaca que en Estados Unidos, más de 700.000 puestos de trabajo fueron generados por las exportaciones al Reino Unido en 2015.
Texas exporta 3,8 mil millones dólares en bienes en 2016 al Reino Unido, con cerca de 900 filiales que operan en el estado.
El ministro británico de Comercio Internacional viajará luego a México para reunirse con el ministro de Economía, Ildefonso Guajardo, para discutir la continuidad de las relaciones comerciales tras el Brexit.
México es un mercado emergente, actualmente el quinto más grande del mundo y tiene un interés en sectores en los que el Reino Unido tiene experiencia como la energía, los servicios financieros y el comercio minorista.
El comercio entre el Reino Unido y México equivale a 3.600 millones de libras anuales y varias empresas mexicanas han invertido en industrias del Reino Unido como alimentos, productos químicos, construcción y servicios financieros.
