Por Guido Brunet – Fotos: Darío Soldani

“El libro físico sigue teniendo un lugar preponderante”, dice Oscar Taborda. Y de confeccionarlos se encarga la Editorial Municipal de Rosario, que cumple ya un cuarto de siglo. El sello también produce discos, que junto con los textos acercan a los autores con los lectores locales y llegan a todo el país, porque “nuestras producciones se leen en todos lados”, afirma Taborda.

El grupo toma como fecha de nacimiento la ordenanza 5427 del 30 de julio de 1992, en la que se nombró como primer director a Héctor Sebastianelli, quien estuvo a cargo hasta 1996. El organismo fue creado en el marco de la entonces Subsecretaría de Cultura y actualmente depende de Secretaría de Cultura y Educación.

En la oficina de la editorial, ubicada en corazón del Parque Urquiza, más precisamente en el Complejo Astronómico Municipal, los libros aparecen en distintos rincones. Entre las hojas, su actual director, Oscar Taborda, cuenta de la apasionada tarea del grupo que conforma la editorial para exhibir el arte de la ciudad al país y el mundo. “En nuestros concursos hemos encontrado autores maravillosos”, resalta Taborda.

En su tarea, tan exhaustiva como artesanal, “se atiende todos los mínimos detalles en la confección de un libro y un disco” para “que los rosarinos puedan encontrar material de calidad, no solamente en la obra, sino también en la presentación”.

Para las primeras producciones, se apeló a los referentes de la literatura de la ciudad como Angélica Gorodischer y Jorge Riestra, y aunque había concursos, no contaban con una frecuencia determinada, así que la editorial comenzó a ordenarlos. Luego, se lanzó a producir libros de diferentes disciplinas como historia, fotografía, ilustración e historieta, siempre “atendiendo al campo local de producción de eso”, detalla Taborda.

Fue en 1994 cuando se creó el sello discográfico, “desde ese momento hacemos libros y discos”, simplifica Taborda. “Los escritores y músicos conocen nuestros concursos y están atentos. Si preparan un disco saben que lo pueden presentar y tienen una chance de publicarlo”, comenta el encargado de la editorial.

“El Estado no solamente tuvo la idea de aplicarlo, sino también la constancia y perseverancia de mantenerlo, que es un valor tan o más importante que la instauración”, asegura el responsable.

Desde que comenzó a funcionar se publicaron más de cien libros y la misma cantidad aproximada de discos. Por año, el promedio de libros es entre diez y quince ediciones.

En cuanto a discos, como piso se hacen cuatro coproducciones, a las que se pueden sumar varios realizados por la editorial, como la serie de conciertos de Alexander Panizza en 2011, por ejemplo, que fueron doce discos dobles que suman catorce horas de música.

Líneas de producción

La mayoría de los libros de la editorial se edita a través de concursos, pero además existen otras líneas de publicación que tienen que ver con la recuperación de obras agotadas o inéditas de autores clásicos.

“Hacemos una recopilación con un trabajo introductorio exhaustivo, con imágenes para completar esa biografía intelectual. A veces esos libros no se resuelven en meses, obligan a un proceso largo”, explica Taborda.

En relación al trabajo en el sello discográfico, se realizan concursos de co-producciones discográficas, donde los músicos presentan su grabación y la editorial realiza la fabricación de los trabajos ganadores. Y por otro lado, hay discos que obedecen al rescate de la memoria musical rosarina como obras de Ramón Merlo o Cholo Montironi, entre otros.

Otro de los ejes de la editorial es el trabajo transversal con diferentes instituciones de Rosario, como el Museo de la Memoria, con el que se hizo El Caso Chomicki y se prepara Historias del segundo cuerpo del Ejército. También se desempeñaron junto al Museo de la Ciudad, la UNR, la Provincia de Santa Fe y otras editoriales.

“No somos los únicos actores, por suerte surgen nuevas editoriales y sellos discográficos en la ciudad, porque hay un movimiento nuevo de editoriales independientes. Hay más diversidad, muchas cosas para leer y escuchar. Y nosotros tratamos de aportar en la medida de lo posible”, relata Taborda.

Proyectos en marcha

Para celebrar estos 25 años de la Editorial Municipal de Rosario se llamó a un Concurso Nacional de Poesía, que cerró días atrás. En el certamen se anotaron 1358 participantes de todo el país -literalmente-, ya que se inscribieron autores de todas las provincias argentinas.

Como resultado del concurso se publicarán varios libros: cuatro de los ganadores (Carlos Ríos, Anaclara Pugliese, Eric Schierloh y Julia Cisneros) y diez menciones especiales.

Además, en las próximas semanas se publicará una antología de historieta latinoamericana acompañada de una exposición itinerante e internacional de 42 autores y se contempla una cuarta antología de poesía.

También, con motivo del 25 aniversario del Festival de Poesía, que se cumple este año, la editorial trabaja en una antología de veinticinco poetas hispanoamericanos que vinieron a leer al festival.

 

Entre los más de doscientos proyectos editoriales, es difícil para Taborda resaltar solamente algunos. “Siempre termino nombrando los mismos”, dice el hombre al ser consultado.

Sin embargo, ciertos trabajos, por diversas razones, permanecen en la memoria del responsable de la editorial, como el libro de fotografía que se realizó a partir de una muestra en el Museo de la Ciudad de fotos de reporteros gráficos del diario La Tribuna entre 1950-1964.

“Hicimos el trabajo de buscar las fotos, fue muy emocionante, lleno de sorpresas, se veía el desarrollo de la ciudad que estaba reflejado en esas fotos. Eso nos resultó sumamente grato de hacer”, expresa.

También destaca los cuentos infantiles y las antologías de poesía, que “son fascinantes de seleccionar” y la colección de crónicas zonales, donde “se conforma un mapa de la provincia, no hay algo parecido en el país”, subraya Taborda.

“Trabajamos mucho con los autores, que vienen con una idea y nosotros hacemos propuestas. Nos gusta el vínculo que se establece con los autores, participamos y acompañamos a los autores en el proceso creativo casi desde el comenzó”, describe el director.

El interés puesto en los autores y lectores

Es sabido que Rosario y la región es referencia cultural del país, tanto en música como literatura. En este sentido, Taborda, quien convive con los artistas locales, destaca “en nuestros concursos hemos encontrado autores maravillosos”.

“Por un lado, de atender a los autores, que los escritores y músicos avizoren una posibilidad de publicación a través de la editorial. Pero la otra parte son los lectores, nuestro interés está puesto en los lectores también, que los rosarinos puedan encontrar material de calidad, no solamente en la obra, sino también en la presentación”.

“Somos un equipo de trabajo, en el sentido pleno. Analizamos mucho cada proyecto y nos involucramos todos en el hacer de cada libro”, completa el responsable del grupo.

Sobre la formas de consumo de las producciones artísticas en la actualidad, el hombre analiza que “en la literatura todavía el libro físico sigue teniendo un lugar preponderante”, mientras que “la música ya no pasa solamente por el disco, hay otras maneras de escucharla”.

Por ese lugar que sigue ocupando el libro en papel, “hay una disposición a hacer las cosas de la mejor manera, atendiendo a todos los mínimos detalles en la confección de un libro y un disco. Hay una atentísima corrección y seguimiento de la imprenta. Todo eso suma para que un libro o un disco resulte un buen material”, comenta Taborda. Porque cuando la edición es buena, las palabras se disfrutan más.