Por José Odisio, enviado especial a Santa Fe

La Copa Argentina está maldita para Newell’s. Y anoche el golpe se lo llevó el equipo de Llop. No supo aprovechar las ventajas que le dio el partido. Ni la que le dio el resultado con el gol en contra de Galeano, ni la que le entregó Olivares con su expulsión.

La Lepra intentó ser fiel a la idea de Llop de ir al frente sin reparos y lo pagó caro. Siempre se mostró descompensado en la contención y los goles del rival fueron consecuencia de ese riesgo que se asume al mandar a los laterales al ataque en todo momento.

El gol sobre el final de García fue un castigo muy grande, tal vez inmerecido. Pero debería ser un llamado de atención para el técnico. Porque jugando así, ganará partidos, pero se pegará muchos porrazos