Por David Narciso

La disputa por fondos entre Nación y provincia copó la primera semana de campaña electoral, controversia potenciada al conocerse el proyecto de presupuesto nacional 2018 que los ministros de Economía y Finanzas, Dujovne y Caputto, defendieron el martes en el Congreso y que ni siquiera incluyó una partida simbólica para empezar a pagar la deuda por coparticipación como ordenó la Corte Suprema de la Nación. Tampoco prevé iniciar obras públicas prometidas una y otra vez por funcionarios nacionales (la excepción es la cárcel federal en Coronda). El caso paradigmático es la construcción del puente Santa Fe-Paraná, cuya licitación había anunciado para este septiembre el propio Macri en su última visita a la capital provincial.

Si bien ya habían hecho manifestaciones institucionales a nivel legislativo, en los últimos días los senadores provinciales justicialistas redoblaron las críticas contra el gobierno nacional y se alinearon con los reclamos que encabeza el gobernador Miguel Lifschitz.

Cuestionamientos

El más crítico fue el presidente de la bancada justicialista, Armando Traferri, quien acusó al gobierno de Macri: “Discriminan más de lo que ellos decían que discriminaba el kirchnerismo. Hay discriminación en la obra pública y en los ATN (Aportes del Tesoro Nacional). Sólo hay que mirar lo que recibe la ciudad de Santa Fe que gobiernan ellos y compararlo con otros municipios. Los números lo dicen todo”.

Entre enero de 2016 y mayo de 2017 la ciudad capital recibió 152 millones de pesos por ATN, una enormidad comparado con Rosario que recibió 13 millones. La última partida, la semana pasada, sumó 47 millones para la ciudad de José Corral y 3 millones para Funes, también de Cambiemos.

Con respecto a la deuda por coparticipación, afirmó que lo que Nación hace con Santa Fe «es correrle el arco todo el tiempo para no pagar”.

Danilo Capitani, senador por San Jerónimo, dijo en la televisión pública provincial 5RTv, en el programa “Tres Poderes”, que el reclamo a Nación por la deuda es también agenda del peronismo y no sólo del gobierno provincial. “Estamos alienados en ese reclamo. Esos fondos le pertenecen a Santa Fe”.

Por su parte el senador de San Javier José Baucero afirmó que «hay una tremenda discriminación desde el gobierno nacional para con Santa Fe. Se ha profundizado totalmente con este gobierno. Nosotros avalamos el reclamo del gobierno provincial por la vía que sea necesaria”.

Confluencia de necesidades

La posición de los senadores justicialistas no es de extrañar. Hay un fluido diálogo con el oficialismo, como lo prueba el compromiso de analizar una posible ampliación del endeudamiento para obra pública autorizado en 2016. El tema se habló el miércoles pasado cuando los ministros de Economía, Gobierno e Infraestructura visitaron la Cámara. Serían unos 6.000 millones de pesos para 2018 por encima de los primeros 500 millones de dólares que la provincia tomó en dos tramos en octubre y marzo pasados.

El otro aspecto que preocupa a los senadores peronistas son las elecciones. El análisis fino de los resultados de las Paso en sus departamentos muestra que parte del electorado que los apoya eligió a Cambiemos y no a la candidata Alejandra Rodenas que ellos promovían y que competía en la interna justicialista con el kirchnerista Agustín Rossi.

Como el Frente Progresista, aunque en menor medida, los senadores resultaron perjudicados por la polarización. La ola amarilla también los amenaza a ellos. Ambos espacios están necesitados de frenar el avance macrista el 22 de octubre. Buena parte del esfuerzo lo pondrán en romper la inercia del voto a la marca Cambiemos, pidiéndole al santafesino que “conozca cuál es la posición de Rossi, Contigiani y Cantard” sobre todos estos temas, quiénes pueden defender mejor los intereses de la provincia.