El ex candidato a presidente de Newell’s, Ariel Moresco, estuvo presente en la conflictiva asamblea que tuvo lugar el pasado miércoles en el club, y le tocó estar en uno de los focos de conflicto más grande, en el que recibió golpes de puño y fue desalojado del lugar.
A varias horas del bochornoso hecho, Moresco dialogó con Conclusión y detalló los pormenores del asunto: “Creo que el objetivo fue callar a aquellas bocas que opinan distinto”.
“Lo que pasó no es más de lo que se ve. Está todo filmado. Hubo una diferencia de interpretación al comienzo, y cuando nos disponíamos a realizar el conteo, comenzaron los desmanes. Vi a una persona que tiró una silla, le hice señas para que se tranquilice y cuando me quise dar cuenta estaba rodeado por 20 tipos que me empezaron a pegar”, relató.
“En ese momento la bataola se intensificó y tanto yo como otras personas fuimos desalojados del estadio cubierto a los empujones”, añadió.
Acerca de su relación con la actual dirigencia, apuntó: “Sinceramente tengo buen diálogo con todos. Tengo mis diferencias pero yo siempre vengo al club. Llamo por teléfono y me atienden siempre. Yo hablo con esta comisión porque pongo a la institución por encima de las cuestiones personales. Siempre voy a trabajar para el club, pero se hace muy difícil en este marco”.
“Nunca vas a ver un tuit ofensivo de mi parte ni nada de eso. Para mí las discusiones se tienen puertas adentro. El tema es que quisieron callar a las bocas que opinan distinto y que no son lineales a lo que plantea el oficialismo. Entonces, un grupo de personas que son del club tuvieron esta reacción y eso marca cómo estamos: el delicado momento que está atravesando el club”, continuó Moresco.
Sobre el comunicado que emitió la dirigencia leprosa acerca de la asamblea, disparó: “Yo no la puedo dar por válida como lo hizo la comisión directiva bajo ningún punto de vista. Me parece un desacierto total y una falta de sentido común absoluto”.
“No hace dos años que hago política en Newell’s. Hace 20 años que estoy en esto y nunca esperé que pase algo así. Ni la más acalorada discusión amerita una reacción de este tipo. Esto no puede pasar nunca más”, subrayó.
En otro orden, destacó: “En la mañana de este jueves hice la denuncia policial. Conté tal cual fueron los hechos y además hay dos caras de los muchachos que me atacaron que las tengo bien identificadas. Es lo que menos me gusta esto de hacer denuncias. Pero si no lo hago yo qué queda para los demás. Hubo mucha gente que recibió golpes”.
— ¿Pensás que puede haber una intervención en el club?
— Es una palabra que ni siquiera me gusta mencionar ni fomentar. Newell’s es grande y de alguna forma a esto hay que sacarlo adelante. La palabra intervención es lo peor que le puede pasar al club. Pero también digo, y me hago cargo, que este rumbo en muchos aspectos hay que modificarlo. Desde la dirigencia se deben hacer cargo de las decisiones que tomaron y hacer que esto no vuelva a pasar, aún en las mayores diferencias.
