Por Santiago Fraga

Desde que comenzó el semestre y viendo la actualidad de cada equipo, se sabía que había una seguidilla de partidos que sería difícilisima para la Lepra en la Superliga: Talleres, Boca e Independiente. Si alguien le hubiese dicho a un hincha de Newell’s que esa serie de partidos ante los aspirantes al título comenzaría con 3 puntos sobre 3, quizás hasta se hubieran largado a reír.

Pero así fue, y fue con total justicia y merecimiento. Newell’s sigue demostrando la levantada anímica que resultó la llegada de Omar De Felippe al equipo y venció a Talleres en un encuentro en donde mereció haberse ido al entretiempo con más ventaja en el marcador. La decisión del técnico de alinear a Leonel Ferroni, Jeronimo Cacciabue y Alexis Rodríguez le renovó la cara a un equipo que venía de ser duramente golpeado.

Durante esa primera mitad, el local contó con no menos de cuatro situaciones claras de gol. La primera de ellas, tras un rechace de Varela y un buen control de Leal, terminó con una gran jugada de Víctor Figueroa que descargó, fue a buscar y obtuvo la complicidad de Ferroni para recibirla y clavar un gran zurdazo para el 1 a 0.

A partir de allí, Newell’s comenzaría a hacer sentir la superioridad sobre un rival totalmente desconocido, y tanto Luís Leal como Alexis Rodríguez y Héctor Fértoli tuvieron sus claras situaciones ante Guido Herrera, sin poder definir ninguno de ellos el resultado.

Precisamente, en esa última ocasión, el árbitro Patricio Loustau cometería uno de sus tantos groseros errores arbitrales de la noche, ya que convalidó saque de arco cuando el uno del equipo cordobés claramente le había tapado el remate al 26 leproso. De esa acción provino el mano a mano de Talleres en el que sancionaría penal de Leonel Ferroni, en una falta que tampoco fue tal.

El tanto de Santiago Silva, sumado a la inmediata lesión de Luís Leal, generó un cambio total en el encuentro. El portugués es demasiado importante en el ataque rojinegro y Daniel Opazo, además de no tener las mismas características, no termina por cumplir un buen rol dentro el equipo. Los de Kudelka parecían conformarse con el empate y el tiempo que gastaban generaba solamente nervios en un Newell’s que ya comenzaba a arrepentirse de la victoria perdida.

Sin embargo, además de un Víctor Figueroa que mostró un nivel superlativo, en este partido hicieron su aparición más que nunca los juveniles más jovenes, que sabían que se jugaban un lugar en el once y la paciencia del público.

Leonel Ferroni cumplió con creces en su ingreso por Fernando Evangelista y jugó un buen partido, incluso aún contra Loustau que le sancionaría aquel penal y posteriormente lo transformaría en el primer amonestado de un partido con mucha fricción.

Alexis Rodríguez, por su parte, demostró que puede ser un aliado ideal del portugués Leal a base de movimientos interesantes y un físico portentoso. No obstante, se perdió un poco cuando De Felippe decidió tirarlo por la izquierda para dejar a Opazo como único punta, algo que había ocurrido ante Atlético Tucumán y Atlético Paranaense.

Finalmente, el mejor de todos los juveniles que ingresaron fue Jerónimo Cacciabue, quien hizo su estreno como titular y jugó un partidazo. Fue el encargado de aportarle movilidad al mediocampo, se conectó bien con sus compañeros y ayudó tanto en ataque (marcando el gol del triunfo) como en defensa (haciendo un corte providencial en el segundo tiempo). Sin lugar a dudas, junto a Figueroa, fueron los mejores de la noche.

Newell’s sigue sumando. La llegada de De Felippe renovó totalmente el aire futbolístico del equipo y que se hayan obtenido 10 de 15 puntos parece casi una proeza. Se vienen dos durísimos rivales como Boca en La Bombonera e Independiente en el Coloso, pero este triunfo ya le permite a la Lepra jugar con más aire el campeonato.