En el marco de la reforma laboral, previsional y tributaria que busca impulsar el Gobierno Nacional, diversos gremios y sindicatos de todo el país se movilizaron este miércoles frente al Congreso de la Nación, en repudio a los cambios impulsados por el Ejecutivo. «Hay que estar unidos. Hoy empieza la lucha y no parará hasta voltear la reforma», sostuvo Sergio Palazzo, titular de La Bancaria.

Ante una plaza repleta, con una convocatoria que superó las expectativas de los organizadores, el secretario general de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky, fue uno de los oradores y afirmó que el Gobierno quiere «un país sin sindicatos».

«No va a haber sindicatos que desaparezcan, lo que va a haber es organización sindical. Vamos a construir unidad junto a los movimiento sociales y defensa al estado de derecho. Vamos por más unidad«, enfatizó Yasky, en la movilización de gremios y organizaciones sociales y de izquierda.

Su par de la CTA Autónoma, Pablo Micheli, instó a los dirigentes «dialoguistas» y a aquellos trabajadores que todavía apoyan al oficialismo a que «entiendan que su lugar está con nosotros y no al lado del gobierno, del patrón, que nos quiere destruir el poder adquisitivo. Hay que ayudarlos a que comprendan que nadie se salva sólo. O estamos juntos, o nos destrozan el país». 

A su turno, el secretario gremial de la CGT y adjunto de Camioneros, Pablo Moyano celebró la presencia variopinta de gremios y colectivos obreros, así como de «compañeros del Consejo directivo de la CGT y muchas regionales que acompañan» la movilización.

El mayor de los hermanos Moyano aseguró que «el gobierno busca desprestigiar los derechos de los trabajadores desprestigiando a las asociaciones gremiales, a los dirigentes gremiales, para poder para avasallar derechos, venir por los convenios y las paritaras».

El camionero señaló que «no es casualidad que en los 90 Menem y Cavallo vinieron con la reforma laboral y muchos nos plantamos, en el año 2000 otra reforma laboral impulsada por De la Rua y Cavallo y hoy nuevamente discípulos de Cavallo en el gobierno vuelven a la carga y muchos dirigentes que estuvimos ayer volvemos estar acá, al frente de los trabajadores para rechazarla».

Por su parte, Sergio Palazzo, titular de La Bancaria, sumó sus dichos y exclamó: «Han creado la brecha más grande y profunda que pudo haber llevado adelante un gobierno democrático: entre los que pueden comer y los que no pueden comer. Se cargaron con 60 mil vidas laborales en Argentina».

«Nos llevan a la miseria y a la fragmentación. A los que se hacen llamar opositores hay que decirles que están traicionando sus propios principios. No queremos y no vamos a ser parte de la quita de la dignidad del pueblo argentino. Este espacio que se ha constituido como un frontón de resistencia a las políticas de ajuste va a reunirse para continuar con un plan de lucha. Hoy no termina el acto, hoy empieza la lucha hasta voltear la reforma«, finalizó.

Desde las 13 comenzaron a marchar el grueso de las columnas sindicales y movimientos sociales hacia la plaza donde más tarde se llevó adelante el acto central.

La izquierda adhirió a la marcha, pero con columna propia, diferenciándose de lo que catalogaron «sindicalismo clasista y burocrático.

Foto portada: Alejandro Amdan/Telam

Gremios marchan al Congreso contra las reformas laboral, previsional y tributaria