Arsenii Kritskiy, titular del movimiento “La fraternidad marinera es indestructible” y suboficial de infantería de marina rusa consideró que la causa más probable tras la desaparición del submarino ARA San Juan es un incendio producto de una falla en el sistema eléctrico, y no una explosión, como primero se pensó.

Esta última versión no resiste el más mínimo análisis, según el especialista ruso. “Me parece que ahora, luego de 11 días de búsquedas infructuosas del submarino, se buscan variantes que expliquen lo ocurrido partiendo de la posible construcción interna del propio navío”, señaló Kritskiy ayer.

El experto recordó que los militares argentinos concluyeron que seguramente el submarino explotó. “En realidad, si hubiera existido esa explosión, con toda seguridad habría sido detectada y se podría reducir el cuadrado de la búsqueda”, agregó.

Según la opinión de Kritskiy, la versión de una concentración de oxígeno en la nave, lo que aparentemente había conducido a la explosión, también presenta dudas.

“Lo más verosímil, partiendo de la información que tenemos, es que se produjeron fallas en el sistema eléctrico del submarino, de lo que los marinos argentinos se quejaron. Es posible que se haya producido un incendio en un compartimento”, concluyó.

Kritskiy puntualizó que para respirar se necesita oxígeno y dentro de un submarino esto implica que una simple chispa, como la denunciada falla eléctrica, puede provocar un incendio, avivado por ese mismo oxígeno necesario para respirar, sin que sea producto de una concentración del gas.

“En la práctica mundial –afirmó- existen suficientes ejemplos de que una chispa bastó para que la nave, sumergida, arda por completo”.