Los nominados para integrar el equipo de gobierno del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, comenzarán este martes a someterse a audiencias de interpelación para ser ratificados por el Congreso, entre ellos algunos de los más polémicos, como, Jeff Sessions, elegido como Fiscal General y quien será el primero en presentarse.

El ex senador, que plantea una política de mano dura contra el delito y está a favor de la deportación masiva de inmigrantes sin documentos, tendrá que responder preguntas de sus ex colegas antes de convertirse en uno de los principales asesores de Trump y de poner en práctica su promesa de campaña de construir un muro fronterizo con México.

La elección de Sessions, conocido opositor a la reforma integral del sistema migratorio, fue ampliamente criticada por grupos de defensa de los derechos de los inmigrantes y se espera una dura sesión por parte de los legisladores demócratas.

También el martes estará en el Senado el general retirado John Kelly, seleccionado por Trump para dirigir el Departamento de Seguridad Nacional y, para el miércoles, se espera otra polémica designación: la del ex CEO de la compañía multinacional petrolera ExxonMobil Rex Tillerson como secretario de Estado.

Tillerson, quien dirigirá la diplomacia estadounidense, tiene cercanas relaciones con el presidente ruso, Vladimir Putin, algo especialmente sensible en un momento de tensiones entre Washington y Moscú por el informe de la inteligencia estadounidense que apunta a una presunta injerencia rusa en las elecciones presidenciales mediante ataques informáticos.

También el miércoles, otros miembros del gabinete ministerial del presidente electo acudirán ante los comités respectivos de la Cámara alta del Congreso, como las designadas para dirigir el Departamento de Educación, Betsy DeVos, y el Departamento de Transporte, Elaine Chao, quien, además, es la esposa del líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell.

También comparecerá esta semana el neurocirujano y ex aspirante a la candidatura presidencial Ben Carson, nominado como secretario de Vivienda y el único negro propuesto para el futuro gabinete.

Estas ratificaciones se producen apenas dos semanas antes de que Trump sea investido presidente de Estados Unidos y generaron fuertes críticas de la oposición demócrata, que acusa a los republicanos de apresurar el proceso de manera interesada, informó la agencia de noticias EFE.

«Este calendario creó una presión indebida sobre la Oficina de Ética del Gobierno (OGE) y los funcionarios de la agencia para apresurarse en estas revisiones importantes», señaló en una carta divulgada el viernes por Walter M. Shaub Jr., director de la dependencia de Ética gubernamental.

La OGE debe analizar los posibles conflictos de interés por parte de los miembros del gabinete antes de que estos sean sometidos a la ratificación del legislativo, una tarea que según las recientes denuncias periodísticas promete ser titánica.

Pese a ello, los republicanos, que controlan ambas cámaras, ya adelantaron que pretenden avanzar con rapidez para tener confirmada a la mayoría del gabinete para el día de la toma de posesión oficial de Trump, el próximo 20 de enero.