Carta documento mediante, la Cooperativa de Taxis de la Terminal de Ómnibus Mariano Moreno le impuso ayer a la concejala María Eugenia Schmuck un plazo de 48 horas para que ratifique o rectifique sus dichos sobre una supuesta mafia que opera en las paradas de Santa Fe y Cafferata.

Sin dudarlo, Schmuck aseguró a Conclusión que “no sólo no nos retractamos y vamos a ratificar la denuncia, sino que la carta documento que recibimos no hace más que confirmar lo que veníamos denunciando que es que hay un grupo de taxistas que se cree propietario de la parada”.

Lo que hacen va en contra de la ley, de la ordenanza Nº 2.649, que dice que todas las paradas de taxis son libres, pero ellos no contentos con eso, amenazan, golpean a todos aquellos que quieren desafiarlos y buscar un viaje en la Terminal”, justificó indignada.

Con firmeza, la concejala dijo que “no las intimida una carta documento de un grupo que está infringiendo la ley” y por eso confía en que “será la Justicia quien diga si lo que hacen es una mafia o no, y es hora de que la Justicia establezca quiénes son los que colaboran para que esta situación se mantenga tanto tiempo”.

Además, señaló que seguirán aportando pruebas y testimonios a la Justicia, porque “había más de una decena de taxistas que querían hacer la denuncia y no se animaban”.

“Pedimos la eliminación de la doble dársena porque el grupo de taxistas se cree dueño y elige a quién darle los viajes y siempre se quedan ellos con los más largos y entregan los más cortos”, explicó y agregó: “También hay una agrupación de maleteros que está coordinado, entonces si eso no es una asociación ilícita que lo diga la Justicia”, cerró desafiante.

Por su parte, Fernanda Gigliani, la otra concejala que acompañó la denuncia de Schmuck dijo a Conclusión que “las trompadas, las amenazas, que haya dueños de paradas que públicamente estén diciendo que tienen prioridad frente a otros trabajadores taxistas para levantar pasajeros, es ilegal, es irregular y va en contra de las normas vigentes de la ciudad, que dice que las paradas de taxis son libres y públicas”.

“La Municipalidad de Rosario tiene que controlar esto y controlar a los que controlan. Esa doble dársena está prohibida, hay un cartel por calle Santa Fe que lo señala, y sin embargo, se da esa situación”, apuntó.