¡Sólo un susto! Esta mañana, alrededor de las 8.30 se produjo la rotura de un caño de gas en la intersección de Navarro y Cullen, cuando trabajaban en el lugar por obras de pavimentación, pero afortunadamente la fuga ya fue controlada.

El fuerte ruido y el olor penetrante alertó a los vecinos que rápidamente salieron de sus casas y llamaron a Litoral Gas para que se acerque a solucionar el problema.

En diálogo con Conclusión, Rita, una de las primeras vecinas en alarmarse contó el episodio: “Esta mañana sentí adentro de mi casa un ruido fuerte. Me asusté y salí afuera a ver qué pasaba y vi que era que habían roto con una de las máquinas el caño principal del gas, porque en el barrio están haciendo el pavimento”.

“Me dijeron que me metiera adentro porque era peligroso y ahora pudieron controlar la fuga y pudieron arreglar todo”, siguió la vecina y cerró: “Fue un susto con suerte”.