Por Carlos Duclos

¿Por qué habría yo de respetar las reglas y cánones de la práctica del periodismo escrito? Si el Estado no pone orden en aspectos sensibles, fundamentales, que hacen a la vida social; si hay líderes sociales y funcionarios que han confundido fatalmenbte libertad con libertinaje; garantía con impunidad, o si hay jueces que queman cunas  por despecho y resentimiento, en lugar de donarlas a los cartoneros (si es que son inútiles, como dicen aquí) para que se ganen unos pesos que siempre faltan, bien puedo yo escribir en primera persona y dejar de lado el formalismo de la palabra periodística.

Por supuesto, ¿qué puede violar  después de todo este laburante de prensa al utilizar la disquisición de cafetín que no hayan violado ya una y mil veces varias autoridades, jueces, funcionarios y dirigentes que no se sabe qué dirigen?

¡Ah!, en todo caso que el lector agudo en la observación y avispado en las lides del periodismo, piense que este escrito es “una sensación” de lo que no debe ser. “Una sensación”, como dijo la funcionaria docente sobre el video que cruzó toda la Patria, y en la que se muestra como un alumno de Zárate cagó a trompadas  a otro en un suceso más de esos a los que se le  llama “bullying” ¿No había algo más castellanizado o lunfardo para definir estos casos?

En fin, pero como estamos en el país que no quería la genia de María Elena Walsh, es normal que “nade el pájaro y vuele el pez, y que los gatos no hagan miau y digan “yes”, porque estudian mucho inglés”.

¡Pero si eso fuera todo! Aquí todo es una “sensación”; es decir aquí la realidad no es tal, sino una ilusión. ¡Sí señoras, señores!: no hay inseguridad y todo se debe (como me dijo un ilustre  penalista esta mañana) a “una instalación mediática” ¡Qué lo parió!, diría Mendieta de la mano del siempre querido y recordado “Negro”.

Todo es una sensación, desde el afano hasta el video en donde claramente se ve a un pibe moliendo a puñetazos  a otro y no pasa nada… total ¿Qué aprendió ese chico en el colegio? que puede golpear a quien se le cante total aquí… fulbito vale todo. Y bueno, si al fin y al cabo parece que la historia dice que  “los de arriba” se llevan lo que venga  y gozan de los esplendores de la vida ¡Dale que va!

¡Ah, mi querida genia! Tenía usted razón: “Me dijeron que en el reino del revés nadie baila con los pies, que un ladrón es vigilante y otro es juez”. ¡Oh!

¿Pero dónde será eso María Elena? ¿Aquí señor? No señor, aquí todo es apenas una inocente sensación.

El alumno que agredió a otro en una escuela de Zárate no será sancionado