Las autoridades de la provincia de Santa Fe ofrecen un millón de pesos como recompensa por datos sobre el paradero de Joaquín Pérez, un hombre acusado del homicidio en ocasión de robo al que liberaron por error en la cárcel de Coronda.

Según la Resolución 0287, que se conoció esta semana y fue firmada por el ministro de Justicia Ricardo Silberstein, la recompensa «se distribuirá entre aquellas personas que aporten datos útiles, relevantes y decisivos» para dar con el paradero de Joaquín Pérez, de quien no se sabe nada desde que el 19 de junio pasado egresó del penal.

Pérez fue liberado por haber cumplido tres años de cárcel efectiva por el cargo de «robo calificado», pero las autoridades del penal no tuvieron en cuenta que también está acusado del «homicidio en ocasión de robo» de Edgardo Giménez, comerciante en la localidad de Granadero Baigorria, ocurrido el 30 de octubre de 2014.

En lo que las autoridades consideraron como «un error inadmisible» los directivos penitenciarios no se percataron de la acusación por el crimen, instruida por el fiscal Pablo Pinto.

El crimen adjudicado a Pérez es el del comerciante Edgardo Giménez, quien se resistió a tiros a ser asaltado en su local llamado «La casa de la porcelana», situado en San Lorenzo y Alvear, de Granadero Baigorria.

Al menos cuatro delincuentes intentaron asaltarlo y el hombre se resistió a tiros, por lo que se originó un cruento enfrentamiento.

En el tiroteo, Giménez y uno de los asaltantes, identificado posteriormente como Sebastián Alejandro Alba murieron, mientras que tres cómplices escaparon y fueron detenidos dos meses más tarde en distintos operativos.

Los tres sujetos, los hermanos Carlos Andrés y Fernando Daniel D’Angelo, de 31 y 27 años respectivamente, y Néstor Fabián «Cumbia» Robledo, de 48, enfrentan desde el 22 de noviembre pasado un juicio por el crimen.