Por Andrea San Esteban

“Mientras el G-20 anuncia el fin de los paraísos fiscales y del secreto bancario, el dinero negro escondido en Suiza ha subido el 14% desde el 2009”. Según advierte en un nuevo libro el economista francés de la Universidad de Berkeley (California), Gabriel Zucman.

Según el economista, “Francia, Alemania e Italia podrían obligar a Suiza a cesar el secreto bancario, si de manera conjunta, impusieran derechos de aduana de alrededor del 30 por ciento sobre los bienes que importan de la Confederación Helvética”. Así los costos para esta última superarían los ingresos de los bancos obtienen de la evasión.

La clave radica, dice Zucman, en “crear un impuesto global progresivo sobre las fortunas. Instaurar un arma implacable contra el disimulo. Con la desaparición de la opacidad financiera los Estados recuperarían la soberanía que les fue arrebatada por los paraísos fiscales y con ella los medios para actuar contra las desigualdades”.

Los paraísos fiscales están en el centro de la crisis global, pero nadie se atreve a hacerles frente.

“Para algunos, la batalla está perdida de antemano. Desde Ginebra hasta Singapur, desde Hong Kong hasta Panamá, los centros offshore, utilizados por los ricos y poderosos para gestionar sus fortunas sin pagar impuestos, son los engranajes ineludibles del capitalismo financiero. Para otros, la batalla está casi ganada. Tras la debacle financiera, los paraísos fiscales prometieron abandonar el secreto bancario, y las multinacionales aseguraron que por fin rendirán cuentas y saldarán sus deudas” Sostiene Zucman

El costo de los Paraísos a nivel mundial

“Los costos son exorbitantes”, dice el economista francés. Por ejemplo, Apple (una de las mayores empresas del planeta), eludió el pago de decenas de miles de millones en impuestos manipulando sus ganancias y esto sumó a millones de habitantes a la miseria.

“La evasión fiscal -es casi seis billones de euros ocultados en centros offshore, según un nuevo estudio de la Universidad de Berkeley (EE.UU.)”

Con la intención de calcular el costo global de los paraísos fiscales, Gabriel Zucman, sostiene en “La riqueza escondida de las naciones”, su último libro, que a “escala mundial el 8 por ciento del patrimonio financiero de las personas está colocado en los paraísos fiscales, un récord histórico”

Esto significa que es una falacia pensar en el blanqueo de los capitales a nivel mundial.

Las medidas diseñadas por la OCDE hasta la fecha, son poco más que una «máscara». La red de acuerdos con paraísos fiscales está «llena de agujeros», advierte Zucman. «Creer que los centros offshore van a renunciar espontáneamente a gestionar las fortunas de los ultrarricos, sin la amenaza de sanciones, es una ingenuidad», asegura.

Los pioneros

Suiza es la plaza mundial más antigua y la más importante, “el destino de la plaza financiera mundial comienza en 1920, después de la Primera guerra Mundial, cuando los países comenzaron a imponer fuertes gravámenes a las fortunas. Las familias europeas más poderosas podían acumular riqueza sin pagar impuestos o pagando muy poco” dice Zucman.

Obviamente con el tiempo aparecieron otros paraísos competidores. Según los cálculos de Zucman a escala global, “alrededor del 8 por ciento del patrimonio financiero de los particulares está en los paraísos fiscales, ellos son73 billones de euros.

“Las fortunas offshore están en varios lugares, como Singapur, Hong Kong, las Bahamas, las islas Caimán, Luxemburgo y Jersey. EEUU, Japón y Francia guardan 67 billones de euros. El dinero del paraíso fiscal no está quieto, alimenta los mercados financieros internacionales y no se evapora de los países de manera aleatoria, sino conforme a un esquema muy preciso. El problema es que resulta difícil saber con exactitud donde está guardado el 70 por ciento de los billetes de 100 dólares que están fuera del territorio de EEUU, pero se sabe que una fracción muy importantes circula en familias y empresas de Argentina y en Rusia”.

El Gobierno luxemburgués calificó como “excesivamente dura” la decisión de la OCDE. Pero según Gabriel Zucman, Luxemburgo es “el paraíso fiscal de los paraísos fiscales, presente en todas las etapas del circuito, utilizado por todas las otras plazas financieras”

El dinero no declarado que va a parar a los paraísos fiscales de los ultras ricos, proviene de trabajo en negro, narcotráfico, sobornos, facturas falsas y otros. Esto implica grandes agujeros en la humanidad y para que los ultras ricos sigan existiendo, necesitan evadir y con ello llevar a la crisis y al hambre a los países periféricos.