El valor del dólar marcó un nuevo récord ayer en la plaza local al superar los $29 para la venta al público (cerró a $29,57 en promedio) tras rozar los $30 en una jornada en la que el mercado pareció querer recordarle al Gobierno que la corrida no terminó y que la desconfianza hacia el futuro de la economía es cada vez mayor.

El economista Esteban Guida, presidente de la Fundación Pueblos del Sur, advirtió que el principal efecto de la suba es que «los salarios quedan retrasados con el precio real de la economía, mientras los precios tienen dinámica del 30 por ciento, los salarios son negociados por detrás de la inflación».

Sin embargo, resaltó que la situación es mucho más grave que el traslado a los precios: «No hay lista de precios, hay escasez de algunos bienes, la inversión está frenada y al haber tasa de interés tan alta la economía se queda sin referencia de precios, por lo que los oferentes retienen productos y se pierde referencia».

Guida subrayó indicó que en este contexto «el trabajo se precariza aun más y se aceptan condiciones laborales mucho peores, que es lo que el gobierno buscaba». Y adelantó: «La variación del tipo de cambio tiene efecto sobre los precios internos porque la economía contempla muchos productos importados».

«A pesar del dinero que se le aplica al mercado cambiario no es suficiente para calmar las expectativas. La economía no genera divisas suficiente inversores que apostaban a títulos públicos, pero vieron que por más que llegó el dinero del Fondo los problemas estructurales no fueron abordados», concluyó.