La producción local de granos tendrá una caída de 17% por la sequía, según las últimas estimaciones del Instituto de Estudios Económicos y Negociaciones Internacionales de la Sociedad Rural Argentina (SRA).

De acuerdo con estos cálculos, mientras que el año pasado se produjeron 125 millones de toneladas, este año se llegaría a 104 millones

Esta caída en la producción determinará una reducción de 21% en las exportaciones (en volumen), mientras que el ingreso de divisas por la venta externa de granos y derivados sería 4.402 millones de dólares más baja que en la campaña anterior, consideró la entidad.

“Vemos con preocupación que la sequía generará un importante impacto en la actividad de las provincias», señaló el presidente de SRA, Daniel Pelegrina, para quien «la caída de la cosecha afectará al bolsillo del productor que estará complicado para encarar la próxima siembra y, a su vez, hacer frente a sus obligaciones”.

Además de afectar a los productores agropecuarios, agregó el informe, estos recortes también impactarán en otras actividades relacionadas con esta cadena de valor.

Por ejemplo, por el menor volumen de granos, se estima que habrá 1,1 millón de viajes de camión menos que en la campaña anterior y que caerá el trabajo de acopiadores, cooperativas e industrias procesadoras.

Como 80% de los gastos que realiza el productor se hacen en la localidad donde está su campo, bajará también la demanda en los comercios y servicios de la zona, como albañilería, plomería, ferretería.

En cuanto a la ganadería, la actividad ya está resentida por un aumento en el precio interno de los granos, como consecuencia de la sequía, que determinará una suba en sus costos.

Por este fenómeno climático, también está muy comprometida la producción de pasto y de reservas de forrajes para el invierno; lo que permite avizorar índices más bajos de preñez.

El aumento interno del precio de los granos, también incide en los costos de la lechería y la producción de cerdos y pollos.

“Si bien estamos abordando todos los temas que hacen a la competitividad en las distintas mesas de trabajo público-privadas, creemos que este escenario extremo de sequía nos lleva a buscar soluciones creativas que permitan morigerar el impacto que tendrá este fenómeno en la actividad productiva”, completó Pelegrina.