La diputada nacional por el Frente Renovador Mirta Tundis manifestó «preocupación» por los cambios de opinión del Gobierno, tras el reconocimiento del presidente Mauricio Macri respecto a «errores» en su gestión.

«Es cierto que si uno trabaja se equivoca, el tema es que nos podemos equivocar una vez, dos, tres, pero no siempre. (La conferencia del presidente) nos dio tranquilidad pero nos preocupa esta situación de cambio de opinión, de prueba y error«, manifestó Tundis.

«Entiendo que el error lo cometen quienes lo secundan pero obviamente uno lo personaliza en el presidente de la Nación porque es quien les da las atribuciones para hacerlo», añadió en declaraciones formuladas a radio Splendid.

En conferencia de prensa ofrecida ayer el presidente Mauricio Macri reconoció que el Gobierno cometió errores pero resaltó que lo importante es no persistir, a la vez que aseguró que no tiene previsto realizar cambios en sus gabinete de ministros.

«Si se equivoca el funcionario que puso el presidente el que tiene que dar la cara es el presidente. Son los funcionarios, los que lo secundan quienes trabajan y le hacen cometer errores«, indicó la legisladora.

«Si fuese una empresa privada varias cabezas estarían rodando», agregó.

Movilidad jubilatoria

Según consideró la diputada nacional, la movilidad jubilatoria debería ajustarse «según la inflación», y criticó al Gobierno por «la forma» en que intentó recortar los haberes previsionales.

Tundis -que preside la Comisión de Personas Mayores de la Cámara Baja- dijo estar «molesta» con «la intencionalidad y la forma en que se refirieron desde el Gobierno a los jubilados. No se puede ahorrar (dinero que administra el Estado) con la necesidad de los que menos tienen».

«La fórmula (de la movilidad jubilatoria) habría que ajustarla según la inflación y eso es un tema de discusión del Congreso, no del Poder Ejecutivo», enfatizó la legisladora.

En declaraciones a radio El Mundo, la diputada consideró que «si se estaba liquidando mal, el Gobierno tendría que haber continuado pagando igual por una cuestión de costumbre y después discutirlo en el Congreso, pero no hacer el escándalo que se hizo».