Por Aldo Battisacco desde Buenos Aires (enviado especial)

Este martes en Diputados un plenario integrado por las comisiones de Obras Públicas, de Pymes y de Presupuesto y Hacienda de Diputados emitió dictamen favorable al proyecto de ley de “Compre Argentino”, que busca “aumentar los márgenes de preferencia para la industria argentina, para promover una mayor participación de las pymes en las compras públicas” que lleve adelante el Estado.

El Gobierno envió en mayo a la Cámara de Diputados un proyecto de ley de “Compre Nacional”, que tiene como eje principal darle mayor prioridad a la producción local en las compras públicas. La iniciativa fue modificada y obtuvo el apoyo del Frente Renovador y el Bloque Justicialista. Por su lado, el Frente de Izquierda de los Trabajadores y el Frente par la Victoria presentaron sus proyectos en minoría.

A comienzos de 2017, según mediciones del Indec, en febrero la industria sufrió una caída del 6 por ciento interanual, en tanto que el primer bimestre registró una baja del 3,5 por ciento. Por lo que se resolvió en la normativa que “cuando se liciten bienes que no son producidos localmente, se establezca un incentivo para que gane aquel proyecto que prevea una mayor integración de piezas producidas en el país”.

El dato relevante es que las contrataciones públicas representan más del 5 por ciento del producto y el 2,5 por ciento del empleo, con lo cual esta medida favorece el crecimiento de las industrias que apuesten a la integración local de piezas producidas en el país.

Estos números dieron el alerta en el Gabinete nacional, y decidieron reflotar el proyecto de “Compre argentino”, política que -según analizan- podría apalancar el repunte del sector industrial.

Las reformas introducidas al proyecto enviado por el Ejecutivo consignan entre tantas y que preocupa al mundo empresario, que la preferencia a las ofertas de bienes de origen nacional para las Pymes se amplió del 7% actual al 15% -el texto oficial proponía llevarlo a 12%-; mientras que para las grandes empresas pasará de 5% al 8%.

Otro de los puntos que mereció un encendido debate es que un bien será considerado de origen argentino cuando sea producido en el país y que “el costo de las materias primas, insumos o materiales importados nacionalizados no supere el 40% de su valor bruto de producción”, desplazando la iniciativa del gobierno que proponía que debía ser de 50%.

Al texto inicial se incorporó que la provisión de obra pública es de origen nacional «cuando el 50% de los materiales utilizados en la obra cumplan con el requisito de bienes de origen nacional”.

Para destacar en la nueva normativa, se agregó a la letra de la ley que aún debe ser votada por la Cámara baja, que la Comisión Bicameral de Seguimiento de Contratos de Participación Público-Privada, tendrá la función de controlar «el cumplimiento de las obligaciones y requisitos de la presente ley por parte de los sujetos obligados, en particular la efectiva participación de la producción nacional”.

De vital importancia para las empresas nacionales será el Programa Nacional de Desarrollo de Proveedores,que tendrá por objeto “desarrollar proveedores nacionales en sectores estratégicos, a fin de contribuir al impulso de la industria, la diversificación de la matriz productiva nacional y la promoción de la competitividad y la transformación productiva”.

Así fue presentado el proyecto del oficialismo, la iniciativa de «Compre Argentino»