Este lunes, con una conferencia de prensa brindada en el Sindicato de Luz y Fuerza de Rosario, el recientemente conformado Movimiento Obrero Santafesino se mostró a la sociedad con un fuerte rechazo a la reforma laboral y a otras medidas que el Poder Ejecutivo puja por poner en marcha.

En diálogo con Conclusión, Alberto Botto, secretario general del Sindicato de Luz y Fuerza de esta ciudad y referente del Movimiento Sindical Rosario, enfatizó que sólo la unidad de todo el movimiento obrero puede poner freno al avance contra los trabajadores y señaló que el nacimiento del Movimiento Obrero Santafesino podría definirse como un hecho histórico en sí mismo.

La unidad de los trabajadores

«El Movimiento Obrero Santafesino nació oficialmente el pasado 31 de octubre en la sede santafesina de Festram (Federación de Sindicato de Trabajadores Municipales). Y este espacio que logramos constituir representa, ni más ni menos, que la unidad de todo el movimiento obrero de la provincia de Santa Fe para enfrentar las medidas de ajuste que pretende llevar adelante el gobierno nacional. Nos juntamos centrales obreras de toda la provincia  entre ellas, la CTA Provincial, las cinco regionales: Venado Tuerto, San Lorenzo, Rufino, Rafaela y Reconquista, Festram, ATE Consejo Provincial, Amsafe y el Movimiento Sindical Rosario», detalló el dirigente de Luz y Fuerza.

«La cuestión es que tenemos una mirada coincidente sobre el problema que nos aqueja a todos los trabajadores. Y eso se puso de manifiesto a partir de las reformas que pretende impulsar el gobierno nacional. Entonces decidimos hacer pública esa mirada que es de preocupación, de rechazo y de resistencia, y la hacemos pública a través de la unidad de todo el movimiento obrero santafesino». Y enfatizó: «Es un hecho histórico, porque esto no se había dado nunca y esperamos que se replique en todas las provincias, y que también la CGT a nivel nacional haga una lectura de lo que estamos haciendo en Santa Fe, que es ni mas ni menos que poner blanco sobre negro y salir a explicar a los trabajadores cual es el impacto que va a tener en sus vidas, y en la sociedad en su conjunto, estas modificaciones. Porque la realidad es que si los trabajadores la pasamos mal, la sociedad también la va a pasar mal».

Peligrosa Trilogía

Al hablar de las medidas que tanto preocupan al movimiento obrero, Botto señala una trilogía que, según sus dichos, van a perjudicar enormemente a los asalariados, pero también a los jubilados. Se trata de las anunciadas reforma laboral, reforma previsional y reforma impositiva.

«En lo que respecta al tema de la reforma laboral, no quedan dudas de que se busca flexibilizar la jornada de trabajo, eliminar las horas extras, achicar los tiempos de litigio en todo lo que respecta en los reclamos que llevan adelante los trabajadores porque se ven perjudicados por las decisiones patronales y eso es sólo por nombrar algunos de los perjuicios que traería la tan mentada reforma», detalló Botto. «Por otro lado, prosiguió, está la reforma previsional… ahí hay que decir claramente que, al menos en Santa Fe, si realmente se transfiere la caja, los jubilados de esta provincia van a perder el 82% móvil, porque eso que el Gobierno llama armonizar, no es ni más ni menos que eso, sacar el 82% móvil.Y también van a ocurrir otras cosas, como que haya mucha gente a nivel nacional que ya no pueda acceder a su jubilación, sumado ello a una cierta cantidad de medidas que se vienen dando y que atentan contra los pasivos, como la pérdida de gratuidad de algunos medicamentos en Pami, o el cierre de las moratorias previsionales».

El dirigente gremial también se refirió a la reforma tributaria, yseñaló: «podemos dar como ejemplo la cuestión del impuesto a las ganancias, ese es un tema en el que se les da respuesta a las empresas y no a los trabajadores, que vamos a tener que seguir esperando».

Además de estos puntos cruciales, Botto señaló que algo que preocupa a todos los dirigentes es el «avasallamiento de las instituciones de la democracia», y la demonización permanente de todos aquellos que no comparten las mismas ideas que tiene el gobierno nacional. «Realmente hay una persecución», aseguró el dirigente.

Plan de acción

Sobre las formas para enfrentar esto que, tal como afirmó Botto, «no es reforma sino ajuste», el secretario de Luz y Fuerza señaló que el Movimiento Obrero Santafesino se propone generar conciencia en la sociedad, e informar cual es la dirección en la que está avanzando la política económica. «Tenemos previsto reunirnos con todos los legisladores de la provincia de Santa Fe y no descartamos reunirnos con legisladores de otras provincias, que son los que van a estar en el recinto donde se votan estas reforma, para que nos den garantía de que no van a votar leyes que vayan en contra de los trabajadores».

Consultado sobre como se conjuga esto con el resultado de las elecciones, claramente favorable al oficialismo, Botto señaló que si bien el gobierno está envalentonado por el panorama electoral, «lo que le dio el pueblo argentino no es un cheque en blanco». «Nadie va a votar para estar peor. Creo que se ha votado la esperanza que, en definitiva, le supo trasladar el Gobierno Nacional a través del aparato mediático de que se iba a estar mejor. Y nosotros lo que vemos es que, a partir de estas medidas que se impulsan, va a ocurrir todo lo contrario».

En cuanto a la mirada del Movimiento Obrero Santafesino sobre la postura de la CGT en relación a estos temas, se mostró esperanzado de que la central obrera mire hacia la provincia y tome el ejemplo. «Lo que se necesita es la unidad del movimiento obrero. Antes de diciembre, la CGT ya debería haberse normalizado con una cabeza y haber iniciado un plan de lucha».

«Hasta ahora, el diálogo propuesto por el Gobierno, es que nosotros tenemos que acatar todo lo que ellos dicen, eso es lo único que parece aceptable para el Poder Ejecutivo. Mientras dicen a toda la sociedad que están abiertos al diálogo, en realidad no es así. Y nosotros creemos que no puede haber ningún resultado fructífero si no existe un diálogo sincero. Y para establecer este diálogo sincero, después de todas las etapas de negociaciones que viene llevando adelante la CGT, estamos convencidos de que ya hay que lanzar un plan de lucha para que el Gobierno entienda que las necesidades de los trabajadores pasan por otro lado». «Es importante, muy importante, que sigamos construyendo la unidad, porque este es un modelo que no distingue y nos atraviesa a todos. Entonces hay que generar conciencia de clases para enfrentar a este modelo neoliberal, sino lamentablemente vamos a ir a una crisis terminal, como la que vivimos en el año 2001».