Por Gisela Gentile

Pareciera que los días pasan cada vez más rápido, será porque nos dejamos invadir por la tecnología, porque nos sobrecargamos de trabajo y no nos tomamos al menos  un minuto para ver qué ocurre en nuestro organismo después de esta vorágine.

Tendemos a fraccionar el cuerpo, y no lo vemos como un todo en relación con el espacio. Culturalmente en occidente concurrimos al médico cuando ya enfermamos, situación que no pasa en Oriente, en donde la clave es la prevención.

Para conocer más acerca de cómo aborda la medicina China estos aspectos sobre la salud, Conclusión entrevistó al profesor de Tai Chi Chuan y Chi Kung Lisandro Belfiore.

-¿En qué consiste la medicina china?

-Es un una construcción de conocimiento que tiene más de 5 mil años, la misma nace de la observación de la naturaleza por personas que se alejaron de la vida social. Estos ermitaños en contacto con la misma, en bosques o montañas, percibían procesos que se daban en el medio con el paso de la estaciones y vieron como los mimos tenían una correlación interna. Uno de los puntos destacados de la medicina china es la que ve al hombre como un microcosmos, o sea el hombre es cielo y tierra en miniatura.

Todas esas leyes  observadas que regían la naturaleza comenzaron  a verse reflejadas en el interior del cuerpo, entender eso fue el primer paso en el cuidado de la salud. Comprender la dinámica de la energía cósmica y de la naturaleza fue el indicio para prevenir enfermedades.

Hoy en día, esta medicina tiene innumerables herramientas para generar el restablecimiento de la salud y beneficios para el organismo. La más conocida es la acupuntura, también es muy utilizada las ventosas y moxas, masoterapia , digitopuntura, auriculoterapia, entre otras.

A lo largo del paso de la estaciones, la medicina china tiene recomendaciones adecuadas a cada ciclo. Desde esa perspectiva, el Yang y el Yin representan las fuerzas opuestas y complementarias que lo rigen todo. Cuando esas energías están armonizadas se mantiene la salud, cuando hay un exceso o deficiencia marcada de uno de estos dos aspectos hay un desequilibrio y se genera un estado de patología o enfermedad.

-El otoño y el invierno suelen venir acompañados por enfermedades  ¿Qué podemos hacer para prevenir las mismas?

-El yang tiene que ver con el fuego, con el calor y es lo que se presenta en exceso en el verano. Y el Yin es lo opuesto, que vemos en plenitud en el invierno. El otoño es una estación de transición de los extremos, es por esto que resulta fundamental prepararnos para enfrentar el invierno. Metafóricamente se lo llama un momento de recolección de energías, es como juntar la leña para cuando nieve.

Realizar actividad física, ejercicios que permitan captar el Yang, la energía pura del ambiente que es la que va a escasear en el invierno. Por otro lado reforzar puntos en la dieta, para la medicina tradicional china la energía vital se compone con la energía del aire, que captamos con la actividad física y la energía del grano o de los nutrientes. En esta época es importante ingerir alimentos nutritivos, granos y todo lo que tenga proteínas y nos dé un aporte energético importante.

-¿Por qué enfermamos según esta mirada?

-La enfermedad se produce por múltiples factores, pueden ser externos como el clima, u internos como una desarmonía de las energías, de los órganos o los canales y meridianos. Esta medicina reconoce a cinco modelos de agentes patógenos externos que pueden atacarnos, éstos son el frío, viento, calor, la humedad y sequedad. También llamados los climas perversos y cada uno daña a un órgano en particular.

El frio (invierno) tiene que ver con el elemento agua y afecta al riñón, el viento (primavera) vinculado al elemento madera perjudica al hígado, el calor (verano) asociado al elemento fuego deteriora al órgano corazón, la humedad (que rige en cada cambio de estación) afecta y se vincula al elemento tierra y se relaciona con el vaso y estómago. Por último la sequedad (otoño) influye en los pulmones.

-¿Cuáles son las claves para prevenir estos daños?

-La premisa para esta medicina es el mantenimiento de la salud. La vida moderna con el estrés como principal causa de afección no permite que podamos obsérvanos  y de algún modo poder ver si hay algo que nos genera desarmonía.

En general cuando percibimos los signos ya es demasiado tarde. Por esto es que recomendamos actividades como el Tai chi chuan  o Chi kung, que van hacia la lentitud en el movimiento. En ellas se realizan trabajos de autoconocimiento y percepción de la energía del propio cuerpo que es el primer paso para cuidar la salud pudiendo ver síntomas o signos que nos muestran un disturbio.

La medicina tradicional china plantea que  mantener el orden es más importante que corregir el desorden. Otra frase clásica que resulta importante en este aspecto es la que dice “atender la enfermedad después de la aparición es como forjar las armas cuando la guerra ya ha comenzado”.