Por Santiago Fraga

Este domingo 14, en vísperas de feriado, vuelve a Rosario Catupecu Machu, la banda formada en 1994 por los hermanos Ruiz Díaz que hoy día no sólo sigue con total vigencia, sino con las energías renovadas y en distintos formatos que lo llevan a recorrer todo el mundo.

Tras haberse presentado de manera acústica a fines del año pasado con Madera Microchip, Catupecu vuelve a la carga en versión eléctrica, con un repaso de lo mejor de sus años de carrera , previo al viaje a Europa y el lanzamiento de su nuevo disco.catupecu2

Conclusión dialogó en exclusiva con Sebastián Cáceres, bajista y guitarrista del grupo desde 2007, cuando se le encomendó la complicada labor de reemplazar a Gabriel Ruiz Díaz. Para él, Catupecu encarriló su vida, y con esa pasión es que siente que su misión en la banda es hacerla crecer y llevarla «al lugar que merece».

Cáceres, quien supo iniciarse en la banda como técnico de sonido y hoy forma parte del cuarteto que sale a los escenarios, habló sobre la ocasión de tocar en una «ciudad divina» y con «una energía terrible» como Rosario; sobre el nuevo material, del cual es inminente que salga algún adelanto previo al lanzamiento en comienzos del año que viene; y también tanto sobre la esencia de la banda con el pasar de los años y los cambios en la escena del rock como sobre su personalidad y el esfuerzo que tuvo que hacer para ganarse su lugar.

catupecu

¿Qué sienten de cara a una nueva visita a la ciudad?

— Rosario para nosotros, y para todo el mundo supongo, es una ciudad divina, hermosa, que tiene una energía terrible y cada vez que fuimos a tocar fue una fiesta. Así que eso ya es un como una expectativa muy muy grande que nos genera la ciudad. Tenemos amigos, siempre nos va bien, el año pasado estuvimos haciendo Madera Microchip, que es el otro show que tenemos, acústico, y este año vamos a hacer eléctrico, con muchas ganas.

¿El show será principalmente repasando temas o habrá cosas de lo nuevo?

— Vamos a hacer un repasode lo que venimos haciendo hasta ahora. Ahora estamos con los temas del disco nuevo que está por salir, por ahí los vamos a ir tirando más a fin de año o principio del año que viene, así que el material nuevo todavía estamos preparándolo. No es un show más, porque nunca lo tomamos así, pero no hay una presentación de algo, es ir a disfrutar de la presentación en Rosario.

¿Qué podés adelantarnos del disco nuevo? ¿Habrá un estilo distinto o seguirá la línea de lo último?

— No sé si va a ser diferente. Lo que va pasando en los discos es lo que te va pasando en la vida, los días van pasando y recibís influencias de diferentes lugares, músicas, reuniones, gentes, libros, películas, lo que fuere, y más o menos va a seguir la misma línea. Justo CACERES catupecuahora acá estamos reunidos escuchando un tema nuevo que ya estoy súper emocionado de lo bueno que está, está buenísimo el tema, que va a ser el primer corte del disco.

¿Cómo se llama?

— Todavía no tiene nombre, recién hoy estamos reunidos escuchándolo (risas). En realidad ya venimos trabajando hace bastante en el tema, ya hay varios temas para el disco nuevo, pero este lo vamos a sacar dentro de poco porque ya está. Así que estamos ahí viendo cómo grabarlo, producirlo, estamos en eso. Pero ya pronto hay un tema nuevo.

¿Este disco vendría a formar parte de una nueva etapa para ustedes?

Cada disco que sale es una nueva etapa. Sin dudas, te abre nuevas puertas, te lleva por muchos lugares. Siempre es como renovarse.

¿Cuesta mucho mantenerse durante tantos años? También con los cambios que han tenido

— No. Personalmente, para mí llevar una banda de rock adelante es casi un milagro, es casi imposible. Puede que funcione o que no, pero igual ahora está lleno de bandas muy buenas, muy bien producidas y muy bien tocadas con canciones muy buenas. A lo que voy es que tener la vigencia después de 22 años te lleva mucho trabajo, concentración, tomar decisiones. Vimos crecer la banda, nos vimos crecer a nosotros, lleva esfuerzo, lleva muchas cosas; te lleva una parte de tu vida. En realidad, cuando lo haces con amor todo fluye, pero hay que trabajar bastante, no es nada fácil.

¿Sentís distinta la escena con lo que era en los comienzos?

— Sí, por suerte está mucho más fácil ahora. Es mucho más accesible a todo el mundo grabar discos, tocar, hacer la difusión, si es propia; todo eso antes era mucho más complicado. La tecnología ayuda, tiene contras y pros. La tecnología ahora le da la chance a mucha gente de que se escuche su arte, lo que hacen.

¿Y una contra?

— Que los discos no se venden más (risas). Que se escucha la música en streaming ahora.

Y justo en ese sentido ustedes han sido una de las bandas que venían de antes que no les ha costado tanto aggionarse.

— No no, la verdad que no. No somos una banda que estemos en contra de eso, en absoluto. Para nosotros todos los cambios que se presentaron hay que saber adaptarse, seguir adelante y utilizar las herramientas lo mejor que se pueda. Si te cerras a eso, medio que te perdés en el camino.

Ustedes siempre han tenido esta cosa de distintos formatos de show. ¿Es algo que hoy día siguen viendo de la misma manera o tuvieron que empezar a verlo de otra forma?

— Digamos que la forma de ganarse la vida para los músicos cambió, y ahora es básicamente salir a tocar. Por suerte nosotros somos una banda que nos encanta tocar, disfrutamos de cada show como si fuera el primero y el último, así que no nos cuesta nada. Incluso, como te decía, recién fuimos con Madera, ahora eléctrico; nos encanta tener dos formatos de show, que aparte no es que lo hacemos para momentos puntuales, sino que son dos formatos que nos van a acompañar para todo. Madera Microchip va a seguir estando. Nos gusta mucho tocar y nos gusta mucho el estudio, amamos lo que hacemos, así que no hay ninguna queja con los cambios ni con la devolución de la tecnología, el mercado, o lo que fuere.
caceres catupeecuPara vos, en lo personal: ¿fue complicado tener que reemplazar a Gabriel?

— Para mí personalmente fue muy difícil por mi manera de ser. Yo soy una persona tímida, extrovertida, solitaria, como retraído, y conocer a ellos desde antes de que existiera Catupecu y yo sabiendo como yo soy como persona me eligieron a mí. Yo tuve que hacer un trabajo muy grande, y lo sigo haciendo hoy día, para vencer eso que no ayuda a un artista arriba del escenario. Por suerte la gente siempre me demostró mucho cariño, nunca nadie me tiró mala onda. Supieron aguantarme, supieron esperarme, ya pasaron nueve años que estoy tocando, los primeros shows tuve que aprender el oficio básicamente. Yo tocaba cuando era adolescente, en los 80′ y 90′ (hoy tengo 44), y después dejé de tocar y era músico pero de hobbie, no profesional. Cuando Fer me dijo de tocar yo me puse a aprender música y después a aprender el oficio en el escenario. Y ahora me siento bastante cómodo. No digo que esté a donde quiero llegar, que me falta bastante, pero me siento cómodo ahora. Creo que el oficio ya lo tengo y que avancé bastante, y para mí es una alegría inmensa que me hayan elegido ser parte de Catupecu porque somos amigos, somos familia, y suena a cliché pero no lo es. Es realmente así. Somos como hermanos entre todos, y es como que Catupecu encarriló mi vida. Yo, muy contento de ser parte de Catupecu. Es una experiencia única y es genial.

¿Cuáles son sus proyectos y expectativas de cara al futuro?

— Futuro cercano es sacar el disco nuevo, a más tardar que mayo del año que viene ya esté en la calle rodando, y nosotros… Catupecu es nuestra vida. Queremos seguir haciendo que crezca, dándole el lugar que nosotros creemos que merece, y para eso estamos aquí, es como nuestra misión en nuestra vida. Llevarlo a donde más se pueda y a donde más crezca.

Ya han pasado por un montón de lados. Han recorrido Argentina prácticamente.

— Si, y ahora en septiembre nos estamos yendo a Europa por primera vez. Vamos a hacer Madera Microchip allá un par de shows, así que muy contentos con el viaje. Y volvemos y ya salimos con el disco, así que esos son los planes.

¿Cómo se preparan para el viaje en Europa?

— Vamos preparados para hacer los dos shows. Tenemos las fechas, que son 20 días que estaremos allá, y volvemos. Falta saber qué lugares van a ser. Mientras más shows podramos armar, mejor. Eso lo está cerrando el mánager ahora. Pero como es la primera vez en Europa estamos muy emocionados. Ir a presentar y que conozcan Catupecu en vivo nos emociona y me gusta.

Foto: Vrodas / Martin Pereira