Un nuevo episodio de inseguridad vuelve a tener como protagonista a un directivo de Newell’s. Cristian D’Amico, vicepresidente leproso, sufrió un ataque a balazos en la noche del martes en la intersección de avenida Pellegrini y Felipe Moré. El dirigente se desplazaba en su camioneta junto a su hijo y ambos resultaron ilesos.

Según los primeros datos aportados por D’Amico en el lugar del hecho, alrededor de las 22 conducía su camioneta junto a su hijo de 10 años que iba en el asiento del acompañante. Al llegar a las inmediaciones de Valparaíso y Pasaje Roldán fue alcanzado por un auto Clio viejo color gris cuyos ocupantes efectuaron múltiples disparos contra el habitáculo del rodado de D’Amico.

El dirigente elevó la velocidad del vehículo para salir de la línea de fuego, que según las primeras informaciones habrían sido más de 20 disparos, y logró llegar a Pellegrini y Felipe Moré donde hay una unidad policial fija como prevención. Afortunadamente, tanto el dirigente D’Amico como su hijo resultaron ilesos y sólo se produjeron daños materiales en el rodado que recibió al menos dos impactos de bala.

Inmediatamente, se montó un gran operativo policial y confluyeron en el lugar autoridades policiales de la zona, personal de la Policía de Investigaciones (PDI), la fiscal Granato y el propio ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro.

Por orden de la fiscal, se realizó un relevamiento en busca de testigos que puedan aportar datos que ayuden a la reconstrucción del hecho como así también se solicitaron las cámaras de seguridad de la zona para tratar de identificar a los autores del ataque. En el lugar se secuestraron un total de ocho vainas servidas, calibre 9 milímetros, según informaron fuentes policiales.

La hipótesis que manejan los investigadores está relacionada con la serie de atentados que tuvieron como blanco a otros dirigentes de la entidad, sumado a las cinco muertes por el liderazgo de la barra brava leprosa. La investigación continuará en manos de la fiscal Verónica Caini que investiga los hechos anteriores.

En diálogo con Lt3, el jefe de la Policía de Investigaciones, Daniel Corbellini manifestó que «concurrí al lugar cuando me alertaron sobre el ataque», donde D’Amico solicitó ayuda a un móvil policial del corredor seguro de avenida Pellegrini y Felipe Moré.

En este sentido aseguró que el ataque al vicepresidente de Newell’s Old Boys no fue una intimidación sino»un ataque directo hacia su persona» y que tanto la vida del dirigente como la de su hijo «corrieron serio riesgo».

En esas circunstancias, observó que «D’Amico estaba muy nervioso y no estaba en condiciones de hablar demasiado, pero no me manifestó haber recibido amenazas anteriores», y agregó que hoy deberá prestar declaración testimonial en la fiscalía «y seguramente más tranquilo podrá brindar más detalles de lo sucedido», indicó Corbellini.

Por otra parte, adelantó el jefe de PDI que «se registraron al menos dos impactos de bala sobre la camioneta con posibilidad de un tercero que se está analizando», en este sentido agregó que fueron muchos disparos de grueso calibre» y aclaró que «no fueron veinte».

Asimismo, Corbellini indicó que «se están realizando muchas tareas de recolección de evidencia y elementos de prueba, propuestas por los investigadores y el ministerio público para dar con los autores del ataque».

Por otra parte, informó que «el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro en conjunto con las autoridades policiales dispusimos una custodia permanente para D’Amico que está a cargo de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) para resguardar la integridad física del dirigente, su familia y sus bines», concluyó.

Solidaridad con el vicepresidente leproso por el ataque sufrido

 

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