Por Fabrizio Turturici

El diputado de la provincia de Buenos Aires y referente del Movimiento Evita Fernando “Chino” Navarro mantuvo un extenso y distendido diálogo con Conclusión donde el gobierno de Mauricio Macri, el papel de la oposición y el futuro del kirchnerismo fueron las temáticas principales. A continuación la primera parte de la entrevista.

Según Navarro, “en estos primeros diez meses el gobierno de Mauricio Macri no ha hecho más que confirmar su tendencia neoliberal: es un gobierno de ricos para ricos. Es que todas las medidas económicas fueron destinadas a favorecer a los grupos económicos de carácter concentrado y en detrimento del pueblo argentino”.

De todas maneras, el diputado bonaerense aclaró que “haremos todo lo posible para movilizar, frenar y derrotar a este modelo, pero siempre desde las vías democráticas”. A su vez, consideró que “el sector golpista dentro de la oposición representa una minoría insignificante”.

En materia económica y hasta la fecha, retomó el líder del Movimiento Evita, “podemos decir que casi 25 mil millones de dólares han sido transferidos del bolsillo de la clase trabajadora a dichos grupos económicos. Esto se da por la suma de la quita de retenciones al sector agropecuario, a la minería, devaluación, pago a los fondos buitre, tarifazos, despidos, apertura a las importaciones, entre otras medidas”, detalló.

En otro orden, Navarro consideró que “como todo gobierno conservador con componentes del neoliberalismo de este siglo, donde los capitales financieros globalizados imponen un capitalismo salvaje donde el único objetivo es el lucro sin importar el costo, se maneja en este esquema. Lo que hacen, no lo hacen por error sino porque está dentro del convencimiento ideológico y de los intereses que representan».

—¿A qué llevará este modelo?

—Debemos ponerle límites. Si no frenamos el ajuste y empobrecimiento, vamos a ir hacia una Argentina donde habrá un promedio de 15% de desocupación, 40% de pobreza con 20 por ciento de exclusión. Del otro lado, una minoría que sobrevivirá con la ecuación campo, servicios y alguna industria que le interese al gobierno en función de sus intereses. Esto dejará a millones de argentinos afuera de la equidad y de la justicia social. Sería un drama social.

—Cuando habla de ponerle límites a este gobierno, ¿a qué se refiere exactamente?

—Confío en que los sectores que estamos en la oposición, a pesar de las diferencias que puedan existir, entendamos que lo que está en juego es el destino de Argentina. Espero que todas las dificultades y diferencias que tenemos puedan quedar a un lado en pos de unificar medidas que defiendan al pueblo y le pongan límites al ajuste. A partir de la resolución de dichas disidencias, podremos avanzar hacia un instrumento político-electoral.

—Usted idealiza una oposición constructiva. ¿Cree que hay sectores que no buscan lo mismo?

—Lo primero que hay que aclarar es que estamos ante un gobierno democrático que -aunque expresa intereses contrarios a las mayorías- fue votado y elegido en las urnas. Esto le da legalidad y legitimidad, lo que no significa que yo comparta sus postulados. De todos modos, vamos a defender la democracia para que este gobierno termine su mandato. Cuando hablo de poner límites, hablo de movilizar, frenar y derrotar siempre desde las vías democráticas. Acerca de su pregunta, no veo grupos golpistas, más allá de lo discursivo o de las redes sociales. La mayoría del pueblo argentino, incluso de las organizaciones políticas y sociales con las que tengo algunas diferencias, están encuadradas dentro del sistema democrático. Podrá haber una minoría insignificante que no, pero el pueblo argentino ha decidido vivir en democracia. 

 

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