Por Aldo Battisacco desde Buenos Aires (enviado especial)
El polémico acuerdo entre el Estado y el Correo Argentino tuvo este martes su correlato. En un acalorado encuentro en la Cámara de Diputados, el ministro de Comunicaciones, Oscar Aguad, aseguró que los encargados de la empresa deben «pagarle al Estado lo que le debe».
Durante cuatro horas el ministro Oscar Aguad expuso ante la Comisión de Comunicaciones e Informática de Diputados, y reveló que el proceso que culminó en el acuerdo “tiene una enorme secuela de complicidades”, a la vez que calificó como “extravagante” el dictamen que desató el escándalo.
Al llegar al Congreso, el funcionario manifestó que lo hacía convocado por la comisión de Comunicaciónes e Informática de la Cámara baja y dijo que lo animaban en su visita «las mejores expectativas» y para «contar lo que se hizo, pero también a ver si encontramos alguna ayuda para resolver estos problemas».
El ministro asistió al Congreso junto al director de Asuntos Jurídicos del Ministerio, Juan Carlos Mocoroa, y el secretario de Tecnologías de la Información y Comunicación, Héctor Huici.
Tras una breve introducción, muy limitada sobre el valor de “la verdad” y de destacar que ese valor desvela al al titular de La Rosada, al transcurrir el tiempo de respuestas todo quedó más claro; Aguad llegó al Anexo de Diputados con la intención de contestar parcialmente las preguntas que le formularon.
Los intentos por mostrar solidez a la hora de contestar los interrogantes planteados por los legisladores, fueron en vano. Fuertemente vapuleado por los diputados opositores, intentó convencer que desandar el acuerdo y llevarlo a “foja cero” era “una metáfora” y se empeño en señalar que “la causa tiene una enorme secuela de complicidades”.
Los cuestionamientos y las preguntas más punzantes fueron las del exgobernador bonaerense Felipe Solá (Frente Renovador), quien lo interrogó acerca de si “existen intereses contrapuestos entre las partes intervinientes” y “cuáles serán los mecanismos para deshacer un acuerdo que el Estado ya firmó”.
Luego de las palabras iniciales, el titular del ministerio de Comunicación, intentó dar explicación sobre que quería transmitir con lo de ‘foja cero’; y aclaró: «lo tomamos como una metáfora, que es anular el acuerdo”, aclaró Aguad sobre la directiva emanada por el titular del Ejecutivo nacional y precisó: “Hemos pedido la caducidad para que luego se declare la prescripción de la acción. Creo que eso demuestra nuestra intención”.
Asimismo, ante los presentes, negó haber dicho que el presidente Mauricio Macri no conociera el acuerdo celebrado entre el Gobierno y el Grupo Socma, y en ese sentido admitió que «es probable» que el presidente «supiera» acerca de esas negociaciones.
«Yo jamás dije que el Presidente no sabía. Yo dije que nunca hablé con el Presidente». E inmediatamente, aludió: «Es probable que el Presidente supiera», señaló el funcionario al exponer ante la comisión de Comunicaciones e Informática de la Cámara de Diputados.
A renglón seguido, direccionó acusaciones al momento de repasar el proceso, imputando que “la causa tiene una enorme secuela de complicidades, que van desde funcionarios que debieron activar el crédito para cobrarlo, hasta funcionarios judiciales que tenían la obligación de cuidar el patrimonio público y no lo hicieron”, para luego agregar que «este conflicto se desarrolló de inicio a fin en la época kirchnerista, en la llamada década ganada, entre 2003 y 2015”.
Otro de los legisladores que increpó en un tono muy duro fue el rionegrino Martín Doñate, del Frente para la Victoria-PJ, quien alertó que el del Correo es “el punto más alto de incompatibilidades y negocios oscuros” del gobierno macrista, que “es beneficiado con un regalito de 70 mil millones de pesos” que implican el perdón del 98,2% de la deuda.
Y añadió: “Admiro la desvergüenza con la que pretende defender este delito. Decir que vuelve a ‘foja cero’ no sólo es admitir el delito, sino que ratifica que el presidente sabía y que lo utiliza a usted y a Mocoroa para robarle 70 mil millones a los argentinos”, asestó.
El nuevo dolor de cabeza para el Gobierno nacional, se generó luego de que Macri hiciera efectiva la condonación de una deuda de 70 mil millones de pesos a la empresa de su padre, aceptando, como brazo ejecutor del Estado argentino, una quita del 98,82 por ciento de la deuda. A lo que se suma un tiempo de pago para el porcentaje restante hasta el 2033.
A su vez, Néstor Pitrola (Frente de Izquierda) apuntó sus críticas a que Aguad no no fue interpelado en el recinto. El legislador recordó que el bloque Cambiemos perdió en el recinto 113 a 79 votos «por una moción de interpelación alrededor de un proyecto presentado por la diputada del PO, Soledad Sosa, del bloque FIT”.
En sintonía con la postura del referente nacional del Frente de Izquierda de los Trabajadores el titular del Partido Justicialista (PJ), José Luis Gioja, quien sugirió: “Si estaban convencidos de la bondad del acuerdo, ¿para qué retroceder? ¿Por qué no lo vieron antes?”.
Por Cambiemos, el oficialista “lilito” Fernando Sánchez ensayó la defensa de la resolución que la administración Macri hace del tema Correo Argentino, al recordar que “no hay antecedentes de algún abogado del Estado que le pida la caducidad de instancia a una empresa”.
Por su lado, el radical Luis Petri remitió al delito de conflicto de intereses, que se le endilga a Mauricio Macri. E cuyano interrogó: ¿Qué pasaba cuando Néstor Kirchner compraba tierras fiscales a 7,50 pesos el metro, y compró más de 200 mil metros en la Patagonia? retrucó, entre aplausos del oficialismo.
Respecto de la presentación judicial realizada por el gobierno este lunes, el ministro informó que la Cámara Nacional en lo Comercial “fijó una nueva audiencia” para intentar llegar a un nuevo acuerdo.
En relación a la misma, Aguad adelantó como vislumbra la continuidad de la causa: “Veo difícil y siempre está latente el nuevo pedido de quiebra, pero la quiebra no soluciona el problema, porque la empresa no tiene bienes y es probable que el Estado no cobre un peso”. La nueva audiencia se celebrará el próximo 16 de marzo.
