La policía de la provincia de Buenos Aires detuvo hoy a Claudio Correa, un sargento retirado de esa fuerza de seguridad, que se presentaba como asesor de la gobernadora María Eugenia Vidal y que repartía tarjetas falsas de abogado del Ministerio de Seguridad provincial, además de asegurar ser amigo personal de la mandataria provincial.

Correa había sido denunciado a la Justicia a principios de mes por el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, después de confirmar que el falso asesor había sido sargento de la Policía Federal Argentina hasta 2008.

De 54 años, Correa quedó detenido a raíz del testimonio de vecinos de La Tablada, en La Matanza, «que manifestaron que un sujeto» se hacía pasar «por abogado diciendo ser amigo y asesor de la gobernadora Vidal y del Ministerio de Seguridad», según el parte policial al que accedió Télam.

Acusado de haber estafado a por lo menos siete personas haciéndose pasar por abogado y asesor de la gobernadora, Correa cobró a los vecinos sumas de entre 3.000 y 14.000 pesos por gestoría de trámites.

Más allá de su inventada relación con la gobernadora bonaerense, de la que se jactaba, el hombre era un estafador serial. En su domicilio, en la calle Miralla, en La Tablada -partido de La Matanza- le encontraron todo tipo de tarjetas.

Correa será indagado mañana por el fiscal de la causa y, según indicaron a Télam fuentes policiales,

fue aprehendido este mediodía en inmediaciones de Miralla y Arieta, en La Tablada, donde había sido denunciado por varios vecinos.

Con estos elementos, anoche se le dio intervención al fiscal Marcelo Diomede, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 5 del Departamento Judicial La Matanza, quien este mediodía dispuso la detención del sospechoso.

Entre los denunciantes se encuentran dos argentinos de 62 años y una dominicana de 34, quien manifestó que el sospechoso le entregó una tarjeta de «abogado» y luego le cobró unos 3.000 pesos para iniciar los trámites de su divorcio «en forma rápida» gracias a sus supuestos contactos en el Poder Judicial.

Otro de los damnificados contó que Correa lo había amenazado diciéndole que si no le pagaba una determinada suma de dinero, él utilizaría sus influencias para que personal de Gendarmería Nacional allanase su domicilio porque allí acopiaba droga de un vecino, dijeron los informantes.

Las fuentes señalaron que el ex policía también fue denunciado por otras cuatro personas, una de las cuales dijo que le había cobrado 9.000 pesos para comenzar los trámites de la escritura de su casa y otra sostuvo que le había pagó 3.000 pesos por un caso de despido laboral.

Mientras que el tercero de los damnificados denunció que le había abonado unos 14.000 pesos también por un caso de despido y luego pactado un encuentro para entregarle otros 10.000.

Los voceros detallaron que la cuarta denunciante dijo que le había pagado 2.500 pesos para trámites de divorcio.

A partir de los datos aportados por los denunciantes -que acompañaron sus declaraciones con las tarjetas y panfletos que el supuesto abogado les entregaba- los pesquisas policiales identificaron al sospechoso, que se había retirado de la PFA en 2008.

Las fuentes judiciales indicaron que Correa quedó a disposición del Juzgado de Garantías 4 de dicho departamento judicial y mañana será indagado por el delito de «estafas» y, en caso de que se compruebe que no es abogado, por «usurpación de título».

Los mismos voceros señalaron que la imputación podría ampliarse a «falsedad ideológica» y «tráfico de influencias» y adelantaron que luego de la indagatoria probablemente el fiscal Diomede solicitará a Garantías que ordene la detención formal del sospechoso.