La Brigada de Prevención de Delitos Rurales de Entre Ríos secuestró un total de 176 ejemplares de aves silvestres que se encontraban en jaulas con el objetivo de su comercialización en la ciudad de Chajarí, informó hoy la Policía provincial.

El operativo se realizó ayer luego de una denuncia de vecinos sobre una vivienda en calle Moreno al 700 de esa ciudad del este entrerriano, y luego de numerosas tareas de inteligencia.

La jueza de Garantías local Susana Pertus ordenó el allanamiento por el cual se secuestraron 176 aves silvestres, jaulas con y sin aves y tramperas.

Entre ellos se encuentran ejemplares de jilgueros dorados, naranjeros, pepiteros grises, cardenales comunes (copete rojo), reina moras grande, corbatitas, brasitas de fuego, pepiteros de collar y verdosos.

Según la ley nacional 22.421, todos los habitantes tienen el deber de proteger la fauna silvestre, conforme a los reglamentos que para su conservación y manejo dicten las autoridades de aplicación.

También, tanto la caza como la tenencia y el tráfico de animales de la fauna silvestre representan una infracción a las normativas vigentes en Entre Ríos (ley provincial 4.841 y normas complementarias).

Los «productos» de la fauna entrerriana también deben tener documentación correspondiente; y la guía de tránsito y certificación sanitaria que garantice estar libre de enfermedades en el caso de provenir de otras provincias.