El viernes 8 de septiembre tuvo lugar la apertura de la muestra “Recuerdos que no voy a olvidar”, la primera muestra-homenaje sobre la vida de Fito Páez que se exhibe en Argentina, que incluye objetos y fotografías inéditas, y se podrá visitar de lunes a viernes, de 10 a 19 horas hasta el 8 de octubre en la Sala Lavardén, con entrada libre y gratuita.

La inauguración contó con la presencia del ministro de Cultura de la provincia de Santa Fe, Jorge Llonch, quien remarcó que “hubiese sido un error no hacer esta muestra”.

Luego, señaló que “en esta muestra está el Fito que, a lo mejor, no está en la serie. Esta parte es el Fito que caminaba por las calles de Rosario, que tocaba acá en el Café de la Flor, en la Lavardén, en la Sala de Empleados de Comercio, entre otros”.

Finalmente, el ministro expresó su deseo de armar el Museo de Fito. “Es algo que me gustaría plantear, obviamente, ya fuera de gestión. Con todos los instrumentos que tiene guardados. Algunos instrumentos  los trajimos para el Museo del Rock, pero otros no”.

Al respecto, Horacio Vargas recordó que “cuando escribí la biografía de Fito Páez me quedó un montón de material gráfico para ese libro que quedó guardado. El año pasado se reeditó ese libro, y aparecieron nuevas fotos, aparecieron nuevos testimonios, y entonces pensé que lo que faltaba para coronar esta etapa de Fito Páez tenía que ver con una muestra”.

“Cuando le conté a Jorge esta posibilidad la respuesta de Jorge duró 10 segundos, dijo: «Hagámoslo», y ya con esa primera puerta abierta, faltaba la otra pata y la otra pata fue Sergio Rébori. Es el antropólogo del rock  rosarino, un arqueólogo que sigue buscando”.

La muestra propone un recorrido casi cronológico de la vida de uno de los músicos más importantes de la ciudad y pieza fundamental del rock nacional.

El recorrido está estructurado en varias secciones o “islas temáticas” donde el público podrá ver, entre otras producciones, material fotográfico inédito de un joven Páez: “Priorizamos mostrar su vida en Rosario, haciendo hincapié en sus primeros 20 o 30 años. Empieza con el álbum familiar con fotos de la comunión, de su padre y de su madre, y luego pasamos a su época de estudiante. Una compañera del colegio Dante Alighieri nos cedió fotografías de Fito en Bariloche, en su viaje de egresados. También hay algunas tocando en su escuela”, contó Sergio Rébori.