Por Santiago Fraga

Fuerza Chape

La tragedia de Chapecoense caló hondo en el universo fútbol y en las canchas de todo el mundo se le rindió homenaje al club, las víctimas y sus familiares; el Coloso, no fue la excepción. En la popular, una bandera con el lema «Fuerza Chape» acompañó al rojinegro habitual, al igual que el escudo del club en la camiseta leprosa. Además, se realizó un emotivo minuto de silencio, donde la popular primero acompañó con trompetas acorde al momento y luego todo el estadio con aplausos. También, la voz del estadio dedicó unas sentidas palabras.

200

El gran ídolo de Newell’s, Maximiliano Rodríguez, fue homenajeado por el club previo al encuentro, recibiendo una camiseta con el número 200 en conmemoración de los ahora más de doscientos cotejos disputados en Primera. También, sus compañeros le regalaron una pelota autografiada por todos, y él se sacó fotos con su familia. El público respondió con una estruendosa ovación para quien venía de ser el héroe en Santa Fe: «Olé, olé… Maxi, Maxi».

Newell’s solidario

En la previa del encuentro, la agrupación «La fiesta es nuestra», en conjunto con Armonía Solidaria, colectaron juguetes en La Casa del Hincha Leproso, que luego donarán en Navidad al Hospital de Niños.

SilVidos

El uruguayo y ex Newell’s Santiago Silva fue recibido con indiferencia cuando la voz del estadio mencionó su nombre, pero cada vez que tocó la pelota, un sector del Coloso le propinó silbidos. El Tanque no tiene una buena relación con los hinchas desde su ida de club. Otro ex leproso, que fue mejor recibido y cuando fue sustituido levantó algunos aplausos, fue Mauricio Sperdutti.

A tomar agua

El sol radiante y las altas temperaturas obligaron a que Néstor Pitana detenga el partido en dos oportunidades para que los jugadores se hidraten.

Día Internacional de Lucha contra la Violencia de Género

En el entretiempo, un grupo de mujeres leprosas salieron a la cancha con esa consigna, recordando la fecha conmemorada el 25 de noviembre y la problemática que las aqueja.

En las buenas y en las malas

A pesar de la derrota, los minutos finales fueron un concierto de los hinchas leprosos, que apoyaron a su equipo con un incesante aliento.