La selección argentina logró una justa remontada por 2 a 1 ante Bolivia en la altura de La Paz, escenario donde no festejaba desde hacía quince años, por lo que se dio el lujo de comenzar con puntaje perfecto al término de las dos primeras fechas de las Eliminatorias.

En el estadio Hernando Siles de la capital boliviana, el experimentado delantero Marcelo Martins puso en ventaja al local a los 24 del primer tiempo, pero veinte después apareció Lautaro Martínez y a los 33 del complemento Joaquín Correa selló la remontada.

El once de arranque para Lionel Scaloni fue con: Franco Armani; Gonzalo Montiel, Lucas Martínez Quarta, Nicolás Otamendi y Nicolás Tagliafico; Lucas Ocampos, Exequiel Palacios, Leandro Paredes y Rodrigo De Paul; Lionel Messi y Lautaro Martínez.

Mientras que el conjunto local dirigido por César Frías lo hizo así: Carlos Lampe; Saul Torrez, José María Carrasco, Gabriel Valverde y José Segredo; Alejandro Chumacero, Diego Wayar, Raúl Castro y Rudy Cardozo; Marcelo Martins y Carlos Saucedo.

El arranque del partido mostró a una Argentina paciente con la pelota en sus pies, todavía sin demasiada prisa por ir a buscar el resultado. El rival, en cambio, fue el primero que avisó con un cabezazo que -ante la mala salida de Armani- casi termina adentro del arco.

Por la falta de equilibrio en la mitad de la cancha, a la defensa le estaba costando detener el lento avance de la Verde, que se sumaba con mucha gente en los últimos metros pero carecía de velocidad para sorprender al cabo de los primeros intentos.

Sin embargo, esa ecuación cambió a los 24 minutos de la primera parte, donde en un centro parecido al primero pero del otro lado, el experimentado delantero Marcelo Martins, que ya sabe lo que es marcarle a esta selección, abrió el marcador con un prolijo cabezazo.

Lejos de quedarse, el equipo de Scaloni se despertó rápidamente del golpe y mostró buenas intenciones por el carril izquierdo de Ocampos, pero le faltaba apoyo desde el centro y ni hablar de la derecha, un sector completamente anulado en el juego.

Con esta dinámica llegó el merecido premio hacia el final de la primera mitad, con una jugada donde el Toro Martínez encaró dentro del área, la perdió y fue a presionar sobre la salida rival para con un rebote mandarla a las redes y poner el 1 a 1.

Al regreso del vestuario, el elenco nacional salió enchufado, no conforme con el punto hasta entonces conseguido. Bolivia, cada vez más retrasado en el campo, empezaba a regalar espacios en la zona de gestación, invitando a Messi a que se haga cargo del cotejo.

El agotamiento físico comenzó a calar en los jugadores y eso influyó para el ritmo del encuentro, que se convirtió en un ida y vuelta constante por la desaparición de ambos mediocampos. Por eso el DT metió mano con el ingreso de Joaquín Correa por Ocampos.

Unos instantes más tarde fue el turno para dos volantes más, Guido Rodríguez y Nicolás Domínguez, que suplantaron a De Paul y Paredes en puesto por puesto. Con esto Scaloni buscó recuperar la contención y cerrar su arco para no volverse con las manos vacías.

Y en una gran jugada colectiva que derivó en la exquisita definición del Tucu Correa, la Albiceleste pudo darlo vuelta con justicia para quedarse con el triunfo en La Paz después de quince años, consiguiendo resultado perfecto en la primera doble fecha de Eliminatorias.