El arquero de Argentino, Lucas Rodríguez, es pieza fundamental del equipo de Marcelo Vaquero, que disfruta del liderazgo en el torneo de la Primera D. El golero, oriundo de Villa Gobernador Gálvez, charló con Conclusión, del gran presente Salaíto.
El elenco Albo, empató el miércoles ante General Lamadrid, en el partido pendiente, que le permitió al conjunto de barrio Sarmiento, acceder a la punta. Para el guardavallas, el resultado fue importante: «Fue un punto positivo por como se dio el partido y porque no pudimos desplegar nuestro juego por las dimensiones de la cancha». Y agregó: «En realidad vas a ser un punto más valorable, si sacamos los 3 puntos contra Yupanqui».
Rodríguez, llegó a Argentino, proveniente de la reserva de Unión, rápidamente se adaptó a la categoría y clausuró su marco: «Es primordial cerrar nuestro arco, porque te da muchas mas chances de sacar los 3 puntos que se necesitan, el trabajo que hace mi defensa es esencial y gracias a ellos no nos convierten».
Al certamen de la D, le quedan 6 fechas por jugar y en el horizonte, el Salaíto jugará con los rivales directos por el título: «Sin dudas que va a ser un final muy lindo, todos los equipos corren con ventaja al enfrentarse todos contra todos, si tenés la posibilidad de ganar, ya van quedando relegados los que pierden».
El conjunto Albo, hace varias temporadas que milita en la última categoría de AFA y existe gran ansiedad en la comunidad Salaíta, por salir de la categoría, el arquero habló sobre la presión por ascender: «No sentimos la presión, estamos disfrutando este lindo momento porque hacemos cosas que solamente nosotros sabemos los obtáculos que nos ponen, y a pesar de todo, hoy en día estamos arriba, pero la humildad que tiene este grupo nos llevó a esto y sabemos que la gente esta muy ilusionada. Y sentenció: «Los hinchas se pueden quedar muy tranquilos que vamos a dejar todo y un poco más, para cumplir el sueño tanto de ellos como de nosotros que es ascender . Pero hay que mantener la tranquilidad esto es partido a partido».
Foto: La Cámara del Sala.
