El delantero Brian Fernández estuvo ausente este martes en la primera práctica de la semana del plantel de Colón de Santa Fe que se prepara para visitar el sábado a Defensa y Justicia, por la 19ª fecha de la Superliga. En declaraciones a un canal deportivo dijo que había sufrido un robo a mano armada.

«Me apuntaron con un revólver en la cabeza», dijo Fernández al canal TyC Sports al explicar su ausencia al primer entrenamiento del equipo que dirige Diego Osella.

Además, el delantero que jugó en Defensa y Justicia y Racing Club dijo que le robaron un Rolex y le tiraron ladrillos a su camioneta, al tiempo que adelantó que se entrenará por la tarde.

«Eran hinchas de Unión, que me preguntaron si yo mandaba en Santa Fe», dijo en alusión a un video que subió hace días a las redes sociales, en el que expresó esa frase.

Fernández contó que le «cuesta jugar en Santa Fe» y que los hinchas de Unión lo viven grabando (con celulares) para que él «salte».

El jugador denunció que el asalto tuvo lugar en barrio El Pozo, aunque no hay registros de denuncia policial en el ámbito de la Unidad Regional I de Policía.

Desde la derrota del domingo ante Banfield (0-1), que complicó aún más la magra campaña del equipo sabalero, se especulaba con los posibles cambios que implementará el técnico Osella para intentar volver a la victoria, pero la ausencia de Fernández volvió a robarse la atención.

Es que el atacante fue la gran apuesta de Colón para reforzar el plantel en este receso, y, hasta el momento, ha sido noticia por sus ausencias y problemas personales, y no por su trabajo y sus actuaciones.

Colón hace 21 partidos que no gana por Superliga en carácter de visitante y acumula cinco derrotas en fila, por lo cual se encuentra en el borde de ingresar entre los tres equipos con peor promedio para el descenso.