Luego de tres empates consecutivos que le impidieron salir de la zona del descenso y la salida de Maxi Lovera que obligó a cambiar la delantera, el entrenador Diego Cocca va delineando el equipo que buscará volver al triunfo en el clásico rosarino.

Así las cosas, el delantero Lucas Gamba terminó el partido contra Colón en Santa Fe con una molestia muscular, y este martes a la tarde se conocerá el resultado del parte médico: en el mejor de los casos, una contractura; en el peor, un desgarro.

De esta manera, el cuerpo técnico es optimista con respecto a contar con el atacante que se ganó la titularidad y tuvo un debut correcto con mucho desgaste físico y la asistencia para el gol de Claudio Riaño en el Cementerio de los Elefantes.

Pero al mismo tiempo estudia alternativas, con el posible ingreso de Sebastián Ribas como punta o el adelantamiento de Ciro Rius o Diego Zabala, dos mediocampistas por las bandas que están capacitados para jugar en la zona de definición.

A falta de cinco minutos para el final del cotejo ante los sabaleros, cuando Gamba sintió el tirón en uno de sus muslos, el encargado de reemplazarlo fue el carrilero por izquierda Jonás Aguirre, aunque su ingreso de arranque corre con menos chances.

Por otra parte, durante el día de descanso que tuvo ayer el plantel, Cocca viajó a Buenos Aires para reunirse con su representante -y el de varios jugadores- Christian Bragarnik y evaluar la posibilidad de sumar otro refuerzo más, pero está ajustado desde lo económico.