Rosario Central se dio un golpazo en su visita a Estudiantes de La Plata, que se impuso en el Único por 3 a 0 para profundizar la crisis canalla y enterrarlo en zona de descenso, en el marco de la undécima fecha de la Superliga Argentina de Fútbol.

El equipo de Diego Cocca no levanta cabeza y suma su segunda derrota luego de siete empates consecutivos. Los goles fueron convertidos por el colombiano Edwar López en la primera parte, Facundo Mura y Matías Pellegrini en el complemento.

El encuentro arrancó con mucha intensidad de ambos lados, con el local complicando a partir de los desbordes laterales y el visitante refugiándose en su campo para salir rápido de contragolpe. Con estas fórmulas lograron inquietar en acciones aisladas.

Otro factor clave a tener en cuenta era la pelota parada, recurso que el Pincharrata sabe manejar históricamente bien, mientras que el Canalla venía sufriendo complicaciones con el marcaje en zona. Y estuvieron cerca en apenas segundos de juego.

A los 24 minutos llegó el primer golpe de la tarde, cuando la Gata Fernández aceleró aprovechando un mal retroceso auriazul y la jugada derivó en un centro atrás que capturó el colombiano Edwar López, para colocarla con tranquilidad para el 1 a 0.

La preocupante falta de ideas se hizo notar hasta el vestuario del entretiempo, con un Central noqueado que se tambaleaba en el campo de juego sin despertarse. Tanto que se hizo difícil poder salvar un solo nombre de ese mal funcionamiento general.

Central se veía obligado a saltar líneas por la inexistencia del mediocampo, mientras que las pocas veces que llegaba a fondo por lo general terminaba con un mal centro que no conectaba con los delanteros perdidos.

La catástrofe se veía llegar y llegó a los cinco minutos del complemento, con un Facundo Mura que tuvo completa libertad para acomodarse y patear con la pierna derecha de media distancia. El 2 a 0 en el partido acabó de tirarlo a la lona.

Cocca metió un manotazo de ahogado al mandar a la cancha a Agustín Allione, Diego Zabala y Sebastián Ribas en lugar de Gil, Rius y Colazo. Así revitalizó la zona de ataque y con más empuje que ideas tuvo la chance de descontar, pero sin efectividad.

El golpe letal se dio a los 38 minutos de la segunda parte a través de Matías Pellegrini, que liquidó el partido metiendo el 3 a 0 gracias a un ataque en superioridad numérica. Los segundos se consumieron con Central pidiendo la hora para no sufrir el cuarto.

De esta manera, el club de Arroyito dejó pasar una oportunidad única ante un rival directo en los promedios que ahora le sacó diez puntos. Está obligado a ganarle a Godoy Cruz en el Gigante para torcer esta historia cuyo horizonte es el descenso.