En el salón Walsh de la Casa de Gobierno se llevó a cabo una reunión entre provincia, municipio, jefes policiales y representantes de Central y Newell’s por el clásico del domingo en el estadio Gigante de Arroyito, donde pidieron reforzar medidas en el marco de la pandemia.

El subsecretario de Seguridad Preventiva, Diego Llumá, fue quien tomó la palabra y dijo: «Todavía no sabemos cuál será la devolución pero estamos en gestiones con la AFA para reajustar el horario previsto: como somos la única provincia que ha autorizado los partidos en horarios nocturnos, creemos necesario que el clásico se juegue a las 21» y no a las 18.40.

«El requerimiento enfático de la provincia es ese, si no se da, hay mucha presión desde el punto de vista sanitario y de seguridad y tenemos la potestad de suspenderlo. Estamos en gestiones pero la incertidumbre manda, hay respaldo de ambos clubes», agregó Llumá.

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En este sentido, el funcionario provincial apuntó: «No queremos que haya festejos ni que la gente se agrupe en los barrios, por eso también pedimos que se libere la televisación del partido, incluso se ofreció que el canal de la provincia accediera a la televisación del mismo».

«Central quiere jugarlo y está haciendo todo lo posible para que así sea, el presidente de AFA ya trabaja en el tema y a la tarde se junta con la televisión para poder cambiar el horario», dijo Ricardo Carloni, el vicepresidente de Central presente en la reunión.

En tanto el gerente de Newell’s, Fernando Acatto, se pronunció por la misma línea: «También queremos jugarlo pero entendemos que es un contexto muy especial y estamos a disposición de las definiciones que se tomen a nivel provincial en cuanto al operativo».