Conducido por un Lionel Messi pletórico, Barcelona venció hoy por 3 a 1 al Athletic de Bilbao en la final de la Copa del Rey, y conquistó su segundo título de la temporada, que invita a soñar con un nuevo «triplete», tras desplegar un juego superlativo sobre el césped del Camp Nou.

El astro argentino adelantó al Barcelona en el minuto 20 con un nuevo gol que quedará en los anales de la historia y sentenció el encuentro en el minuto 29 de la segunda parte, después de que el crack brasileño Neymar ampliara la ventaja a los 36 minutos de la etapa inicial.
Athletic Bilbao, en tanto, descontó con un gol de cabeza de Iñaki Williams en el minuto 34 de la segunda parte.

Con esta victoria, el conjunto «azulgrana» obtuvo su Copa del Rey número 27 y Messi su 24to. título profesional, quedando a uno de Alfredo Di Stéfano, el argentino con más galardones en la historia del fútbol. Por su parte, Javier Mascherano celebró su conquista número 11 en los cinco años que lleva en el Barcelona.

El astro argentino se convirtió esta noche, una vez más, en el héroe de los culés. Pero si bien tuvo una actuación estelar, no fue el único que se destacó.

Xavi Hernández, jugador emblema del Barcelona, se llevó gran parte del cariño de la hinchada disfrutando de su último partido en el Camp Nou y levantando, junto al otro capitán del equipo, Andrés Iniesta, el segundo título de la temporada.

En cuanto a Messi, con los dos goles de hoy, suma 58 en 56 partidos esta temporada, aunque aún le queda la final de la Champions League ante Juventus, programada para el sábado 6 de junio en Berlín.

Liderado por un Messi en plena forma y con Mascherano como titular indiscutido en la zaga central, el «Barsa» levantó la Copa del Rey después de salir campeón de la liga española por vigesimotercera vez.

Es por eso que la de hoy no era una final cualquiera. Y el hecho de que Athletic de Bilbao estuviese enfrente también era especial. En 2009, con Pep Guardiola como técnico, los culés se impusieron a los vascos por 4-1 en Mestalla, y consiguieron el primer título de lo que luego se convirtió en el histórico «triplete».

Y frente al Athletic, el equipo de Luis Enrique dio esta noche el paso que necesitaba en el camino hacia la hazaña que no ha logrado ningún otro club europeo: conquistar un triplete por segunda vez.

Messi, Messi, Messi, y otra vez Messi. La hinchada culé no tiene palabras para agradecer lo que había hecho el astro rosarino.

Era el minuto 26 más de 90 mil personas se quedaron con la boca abierta y no salían de su asombro. La Pulga se metió entre cuatro jugadores, los eludió y tras un amague batió a Herrería con un disparo que entró al ras del primer palo, donde parecía que no había espacio.
«Messi es de otro planeta», «es un extraterrestre», «es inhumano», exclamaban casi en simultáneo los relatores y comentaristas desde la tribuna de prensa del Camp Nou.

El duelo comenzó con el Bilbao presionando, pero el Barcelona rápidamente tomó el control para imponer su dominio.

En el minuto 10, el árbitro anuló un gol de Neymar por fuera de juego; luego el uruguayo Luis Suárez tuvo un gol en su pies pero Herrería tapó el remate. El gol se resistía, entonces, Messi entró en acción en el Camp Nou.

El golpe dejó al Athletic tocado y a merced de un Barcelona que buscaba más. Toque a toque y con calma, llegó el tanto de Neymar, que remató un centro de Suárez, quien le dejó el gol servido en bandeja.

El conjunto culé se pudo ir al descanso con el partido más que sentenciado, a juzgar por las -al menos- cuatro ocasiones claras desperdiciadas.

Aún así, el segundo tiempo estuvo a la altura de una final ofreciendo más batalla y goles. Pasados 10 minutos, el Camp Nou vivió un gran momento de emoción, cuando Iniesta fue sustituido por Xavi, quien estaba a punto de disputar el último partido en el Camp Nou. Luego de ponerse el brazalete de capitán, Xavi se dedicó a derrochar talento aportando su peso de ícono a un Barcelona que, de la mano de su máxima estrella, no dejó de deslumbrar.

En el minuto 29 Messi volvió a marcar y dejó al Barcelona a las puertas de un triunfo incuestionable.

Dani Alves, imparable, corrió por la derecha y tiró centro: el mejor del mundo, en medio de tres defensores, ganó la pelota y batió a Herrería.

Hubo una celebración muy especial entre el argentino y el brasileño, quien se encuentra con un pie afuera del Barcelona.

El Atlhetic parecía entregado, pero el Barcelona se desconcentró y permitió un gol, que en el resultado final no dolió.

El delantero Williams, de cabeza, envió la pelota a la red de Ter Stegen, marcando un tanto que solamente sirvió par el orgullo del equipo y para el aplauso de los milles de hinchas vascos que coparon Barcelona para darles aliento.

Como ya es tradición, la final de la Copa del Rey se vivió con los sentimientos a flor de piel. Desde los silbidos al himno nacional, esta vez con más intensidad al tratarse de dos equipos con trasfondo independentista como son los vascos y catalanes, hasta las celebraciones de la victoria sobre el césped del Camp, donde, una vez más, hubo un nombre no eclipsó a todos los demás: Messi, Messi, Messi.

-Síntesis-

Barcelona: Ter Stegen; Alves, Piqué, Mascherano y Jordi Alba; Busquets, Iniesta, Rakitic; Messi, Neymar y Luis Suárez. DT: Luis Enrique

Athletic Bilbao: Herrería, Laporte, San José, Beñat, Bustinza: Iraola, X.Etxeita, Mikel Rico; Aduriz, Balenziaga y Williams. DT: Ernesto Valverde.

Goles en el primer tiempo: 26m. Messi (B); 36m. Neymar (B).
Goles en el segundo tiempo: 28m. Messi (B); 34m. Williams (AB).

Amonestados: Piqué y Busquets (B) Iraola, Williams, Balenziaga y Aduriz (AB)

Cambios en el segundo tiempo: 10m. Xavi por Iniesta (B); 13m. Susaeta por Iraola (AB); 30m. Ibai por Rico e Iturraspe por Beñat (AB); 32m. Jeremy Mathieu por Alba y Pedro por Suárez (B)

Estadio: Camp Nou (Barcelona)

Árbitro: Carlos Velasco Carballo (Madrid)