De siete clasificados a segunda ronda, Argentina pasó hoy a colocar a dos en la tercera ronda de Roland Garros, aunque se trata de las máximas esperanzas albicelestes: Juan Martín Del Potro y Diego Schwartzman, sexto y duodécimo del mundo, que siguen soñando con hacer algo grande.

Guido Pella (78º) y Horacio Zeballos (103º), por contra, tuvieron que despedirse este jueves del torneo, un día después de que lo hicieran Federico Delbonis, Marco Trungelliti, Guido Andreozzi y Leonardo Mayer, ese último en un partido de la primera ronda.

Del Potro continúa ilusionando y derribó sin excesivos problemas al francés Julien Benneteau (62º del mundo) por 6-4, 6-3 y 6-2.

El tandilense jugará en la siguiente ronda contra el español Albert Ramos, número 36 del mundo y que en 2016 llegó a ser cuartofinalista de este torneo. Fue un segundo triunfo seguido para Delpo contra un veterano jugador francés de 36 años y la confirmación de que la lesión en el aductor izquierdo con la que llegaba a París no le impide resolver sus partidos con solidez. Frente a Nicolas Mahut, en el primer partido, llegó a perder el primer set, pero esta vez resolvió con mayor autoridad todavía.

«Me encontré mejor, voy cada vez mejor. Pude resbalar más, pude correr más. Esto me da tranquilidad. Voy mejorando día a día y el sábado tengo un nuevo partido para seguir sintiéndome bien», celebró Del Potro en su conferencia de prensa posterior al partido.

El choque contra Benneteau fue el reencuentro de Del Potro con la pista central Philippe Chatrier, donde el año pasado quedó eliminado en la tercera ronda contra el británico Andy Murray, entonces número 1 mundial, tras una gran batalla que le hizo ganarse las simpatías del público francés.

También fue cómoda la victoria de Diego Schwartzman, que continúa mostrando por qué ha conseguido escalar hasta el duodécimo puesto de la clasificación mundial. El Peque derrotó fácilmente al checo Adam Pavlasek (185º) por 6-1, 6-3 y 6-1.

«Me siento más seguro con mi juego y los rivales me respetan más. Soy consciente de que tuve dos buenos primeros partidos para tratarse de un Grand Slam. Estoy jugando muy bien, pero ahora vendrá un rival más fuerte», estimó el jugador argentino.

Schwartzman, que apenas invirtió una hora y 27 minutos en la pista, tendrá como próximo rival al croata Borna Coric, 40º del mundo y que nunca ha superado la tercera ronda en un torneo del Grand Slam.

El jugador bonaerense de 27 años tampoco superó nunca la barrera de tercera ronda en Roland Garros, pero en los últimos torneos del Grand Slam ha mejorado su rendimiento y fue cuartofinalista en el Abierto de Estados Unidos y llegó a octavos en el Abierto de Australia.

Entre los dos eliminados argentinos del jueves, Guido Pella (78º del mundo) era quien tenía una misión casi imposible: Rafa Nadal, el rey del torneo y grandísimo favorito a un undécimo título en París. El español le arrolló con un 6-2, 6-1 y 6-1, sin dar opción.

«El resultado fue una paliza, aunque en varios games podía haber ganado yo. Él es muy rápido, lee muy bien las jugadas. A cinco sets es muy difícil ganarle. A tres sets puede que alguien le pueda ganar aquí, pero a cinco sets lo veo difícil», estimó Pella.

Foto: sitio oficial Roland Garros.