Lo demostró en etapa clasificatoria y lo ratificó en la final. Llegó con ilusión y se fue con una medalla en el pecho. Federico Grabich, de 25 años y oriundo de Casilda, inscribió con letras grandes su nombre en la historia de la natación y del deporte argentino al quedar en el tercer lugar en la prueba de los 100 metros libres en el Mundial de Kazan, en Rusia. Así, Grabich se transformó en el primer nadador argentino en ganar una medalla en una Copa del Mundo.

Con un tiempo de 48s12, el casildense se colgó la medalla de bronce en una de las pruebas más emblemáticas de la natación.

En cambio, el oro se fue para China con la victoria de Ling Zetao con 47s08, mientras que el segundo lugar del podio y la medalla de plata correspondió para el australiano Cameron McEvoy con una marca de 47s95.

Grabich ya había igualado el miércoles a Conrado Porta (1978) y Georgina Bardach (2003, 2005 y 2007), quienes eran los únicos finalistas en la historia de la natación. También se destacan con la particularidad de la disciplina que en aguas abiertas Gabriel Chaillou había logrado una medalla en los 25 kilómetros y Cecilia BIagioli fue 5º en 2011 en la prueba olímpica de 10 kilómetros.

Además el logro es parte también de la entrenadora de Grabich, la rosarina Mónica Gherardi.