Central Córdoba cayó ante Luján por 2 a 0, esta tarde en el Gabino Sosa y dejó pasar la chance de meterse en zona de clasificación del Reducido de la Primera C, en el marco de la antepenúltima fecha del certamen de ascenso.

Para el Charrúa el cotejo de este sábado era una verdadera final, porque se enfrentaba a un rival directo en la lucha por ingresar al octogonal de ascenso, en casa. Sin embargo, los bonaerenses fueron los que entendieron a la perfección la consigna y el elenco rosarino nunca hizo pie en el trámite del juego.

Desde el vamos, Luján tomó la iniciativa y se hizo del dominio de las acciones, ante una línea de volantes local, que quedaba siempre a mitad de camino, no retrocedía bien ni se adelantaba con criterio para atacar. Con ese contexto, los bonaerenses empezaron a inquietar al golero Giroldi y cuando promediaba el primer tiempo, apareció Damián Santagati, que tomó un rebote en el área y anotó el primer grito de la tarde.

En el complemento, el DT Teglia movió el banco e ingresaron el Chelito Delgado y Armoa, para arrimar un poco más de peligro. Luján se abroqueló bien atrás, el Charrúa tuvo un par de situaciones, muy poco para dar vuelta el partido y de contra, la visita con una gran corrida de Lucas Chambi, liquidó el pleito.

Central Córdoba tuvo una pobre perfomance, y si bien todavía tiene chances matemáticas, esta a seis de Merlo (48), cuando quedan dos partidos por jugar, pero desde lo futbolística transmite poco, como para soñar con una hazaña, que además dependerá de otros muchos resultados a favor.

El Charrúa transita un campeonato para el olvido, sin una línea de juego definida, cediendo protagonismo partido tras partido y sufriendo la falta de orden en el retroceso. En definitiva, el Matador tendrá que hacer una autocrítica urgente para cambiar el pobre presente futbolístico.

El Azul de Tablada formó con: Matías Giroldi, Gerardo Pérez, Juan Casini (López), Leandro Esquivel, Cristián Sgotti; Cristián Yassogna, Renzo Funes, Lucas Bracco (Armoa), Federico Ferrari; Gastón Tedesco (Delgado) y Lucio Cereseto.

Foto: Tony Del Duchetto.