El handball es un deporte que crece en Rosario y en el club Río Negro tiene una gran popularidad. Para explicarnos el notable desarrollo del deporte en la ciudad, la entrenadora del club de zona oeste, Soledad Gimenez, dialogó con Conclusión.

La primera consulta giró alrededor de las características del handball: “Una de las cosas más lindas es que no es un deporte que se hace competitivo entre los compañeros, ya que todos pueden jugar en el mismo partido y nadie queda en el banco, entonces todos se apoyan para aprender y crecer juntos”. Y agregó: “Es un deporte donde nadie lo hace para ganarse la vida, los papás no tienen tanta presión, incluso son muy pocos los que vienen a acompañar a sus hijos en los partidos”.

Río Negro, es una entidad del oeste rosarino, con una gran apuesta en lo social, la técn ica contó cómo se inicio la práctica del deporte en el club: “En el año 2005 un grupo de chicas que jugaban juntas desde el 2001 en otro club, tuvo inconvenientes y decidieron abrirse camino, para ello hablaron con el presidente del club y ese mismo fin de semana trajeron el primer torneo con el nombre de Rio Negro. Luego de un tiempo armaron varones mayores y a medida que fueron consiguiendo horarios, armaron inferiores. En el 2009 tuvimos el primer equipo de cadetas/cadetes e infantiles mixtos”. Y sentenció: “Arrancamos en el 2005 siendo 9 jugadoras y hoy contamos con 60 jugadores, en todas las categorias de la rosarina”.

Soledad Gimenez explicó el por qué los jóvenes se inclinan por jugar al handball: “Ayudó mucho para el crecimiento y reconocimiento de la gente del deporte,  la destacada labor de los Gladiadores (seleccionado argentino de balonmano) y que la Rosarina apuesta hace unos años a mejorar el trabajo en inferiores de todos los clubes”.

“El torneo de la rosarina, está armado con un torneo Apertura y Clausura, en mayores y en la rama femenina se divide en A y Promocional, mientras que en varones solo una. Con las inferiores es más difícil, porque no todos los clubes tienen categorías, por lo que se hace monótono, aburrido y generalmente son encuentros para fomentar también  que todos se sumen”, concluyó la orientadora.

A la conductora, se la consultó sobre la convivencia entre los jugadores: “La verdad es que somos pocos y nos conocemos mucho, en general cuando son chicos, más de un jugador juega algún partido para otro club para ayudarlo a completar el equipo o se juntan en las prácticas de seleccionado, por lo que jugar enfrentados muchas veces se hace en contra de amigos”.

También se refirió a los requisitos para practicar el handball: “En general es muy económico: un playón, zapatillas, arcos y pelotas. Pero si querés preparar jugadores con un buen nivel y que participen de la rosarina se necesita una cancha reglamentaria (en Rosario solo el Centro Asturiano cuenta con una). La nuestra (Río Negro) se usa muchísimo pero es un poco más chica que 40 metros
por 20. Los otros clubes deben alquilar para poder ser local (esto es muy costoso), también las pelotas son difíciles de conseguir, y cada una ronda los $450 (si contamos que por momentos se necesita una cada dos como mínimo, se necesita mucha inversión)”.
“También es importante que sepan que un jugador de handball paga la afiliación y los arbitrajes en cada partido. Y es muy caro, ya que no se consiguen esponsor que ayuden a un equipo a viajar, ejemplo: a cada jugador ir a representa r a el club a un nacional, le sale aproximadamente cinco mil pesos”, sentenció Gimenez.

Para finalizar, la entrenadora se refirió al nivel de los
jugadores rosarinos, con chances para integrar el combinado argentino: “En este momento no hay convocados, pero Rio Negro fue uno de los pioneros en tener jugadores en la selección, si bien ninguno llegó, en el 2013 una de las cadetas, quedó entre las ultimas 18 de las 16 que viajaron al Panamericano de menores”.